Aceite de onagra: propiedades y contraindicaciones

Diversos estudios han señalado que la utilización del aceite de onagra es muy beneficiosa para el tratamiento de diferentes problemas y trastornos que afectan a la salud femenina, motivo por el cual esta planta ha sido valorada comúnmente como la planta de la mujer.

Por un lado, encontramos que es excelente para aliviar los síntomas que padecen las mujeres en la menopausia, entre los cuales destacan los sofocos, la retención de líquidos, la sequedad de las mucosas, los cambios de ánimo, la irritabilidad, etc. La onagra contiene fitoestrógenos y, por ello, sirve para calmar estos padecimientos provocados por los cambios hormonales que el cuerpo femenino experimenta en esta etapa.

Así mismo, las mujeres que sufren el llamado síndrome premenstrual (SPM) también pueden beneficiarse del aceite de onagra, pues su elevado contenido en ácido gamma-linoléico contribuye a la formación de la hormona prostaglandina E, la cual disminuye los procesos inflamatorios. Es excelente para aliviar la inflamación abdominal, las molestias y sensibilidad en los senos, los dolores de cabeza, las dolencias de espalda y otros síntomas emocionales como el nerviosismo, la irritabilidad y los altibajos anímicos. En el siguiente artículo mostramos más Remedios para el síndrome premenstrual eficaces.

Gracias a estas propiedades, el aceite de onagra también se ha utilizado como un buen remedio natural para reducir los bultos benignos en las mamas, los quistes de ovario y tratar la endometriosis, que es la inflamación del tejido del útero que ocasiona, entre otras cosas, alteraciones en la regularidad de las menstruaciones.

El aceite de onagra es un buen producto para el aparato circulatorio, pues por lo general mejora la circulación de la sangre y gracias a sus propiedades anticoagulantes, favorece la dilatación, favorece la flexibilidad de las arterias y reduce el riesgo de que estas se inflamen. Todo ello hace que sea excelente para reducir la presión arterial elevada y, en definitiva, proteger la salud del corazón y prevenir el padecimiento de enfermedades cardiovasculares.

Es también perfecto para reducir los niveles elevados de colesterol malo y triglicéridos en sangre, así como para disminuir y sosegar el avance de la arteriosclerosis, que es el endurecimiento y la rigidez de las arterias.

Su capacidad para mejorar el flujo sanguíneo hace que sea un buen aliado natural para tratar padecimientos como las hemorroides, las varices o la flebitis.

Al ser un poderoso antiinflamatorio natural, el aceite de onagra puede ser útil para aquellos pacientes que sufren de artritis reumatoide. Su consumo puede ayudar a reducir la inflamación de las articulaciones y aliviar al mismo tiempo los dolores que esta provoca. Además, mejora la flexibilidad de la articulación o articulaciones afectada y consigue que la rigidez vaya aminorando de forma progresiva.

De hecho, un estudio realizado a pacientes de Estados Unidos con esta enfermedad demostró que aquellos que tomaron cápsulas de aceite de onagra presentaban menos signos de inflamación y no sentían tantos dolores articulares.

Otra de las propiedades del aceite de onagra más interesantes es que actúa como un buen protector para el estómago, ya que protege las mucosas gástricas y es un excelente producto natural para tratar afecciones inflamatorias digestivas como la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn.

Por otra parte, se ha señalado que es un estupendo remedio para combatir los síntomas de la resaca y se han recalcado sus efectos positivos sobre el hígado en aquellos pacientes que se están sometiendo a tratamientos contra el alcoholismo.

Las personas diabéticas pueden encontrar en el aceite de onagra un buen suplemento natural para apoyar su tratamiento habitual. Esto es porque favorece que los niveles de insulina se mantengan estables y, además, previene el padecimiento de problemas en el sistema nervioso que pueden sufrir estos pacientes, tales como problemas de visión o pie diabético. Antes de empezar a tomar el aceite de onagra para este fin, es importante consultar con el médico si el es compatible con el tratamiento que se está siguiendo para la diabetes.

Además de todo ello, a modo de uso tópico el aceite de onagra también cuenta con propiedades increíbles para mejorar el aspecto de la piel, el cabello y las uñas:

• Piel: mejora el acné, es bueno para el tratamiento de eccemas, resequedad y para prevenir el envejecimiento de la dermis.
• Cabello: permite reducir la caspa en el cuero cabelludo y dejar el cabello con una apariencia mucho más saludable.
• Uñas: es ideal para hidratar las uñas cuando están demasiado débiles o quebradizas.

Una vez conocidas todas las propiedades del aceite de onagra, es importante también saber en qué casos su consumo está contraindicado para no poner en riesgo la salud. Así, no es aconsejable tomarlo en las siguientes situaciones:

• Durante el embarazo y el periodo de lactancia.
• Si se sufre de epilepsia o cualquier otro desorden del sistema nervioso.
• Se padecen de problemas de coagulación y se están tomando medicamentos anticoagulantes o antiplaquetarios.
• Se padecen enfermedades mentales.
• Antes o después de una intervención quirúrgica.

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