Caries: causas, síntomas y tratamiento

Este padecimiento es más común de lo que se cree, pero sus efectos a largo plazo, sin un tratamiento adecuado, pueden traer como consecuencia la pérdida de los dientes. Las caries tienen su origen en la acumulación de placa dental, producida por las bacterias que viven en nuestra boca, la saliva y los alimentos que consumimos diariamente, si esta placa no es eliminada constantemente, a través del cepillado, comienza a descomponerse y a dañar el esmalte, creando orificios en los dientes. Aunque en una fase inicial, las caries no causan dolor, si se descuida, puede volverse más grande y alcanzar los nervios.

Las causas más comunes de las caries son:

• Consumo de carbohidratos como azúcares y almidones y sobre todo los que tienen un aspecto viscoso, ya que son los que se mantienen sobre el diente por más tiempo.
• Alimentos ácidos, hacen que el diente pierda sus minerales y ayuda a que la placa se acumule.
• La falta de flúor aumenta las posibilidades de que se produzcan caries, porque el esmalte se debilita.
• Falta de higiene.
• Medicamentos, sobre todo los que se utilizan en la infancia, ya que suelen tener una cantidad de azúcar elevada.
• pH bucal, tiene que ver con el grado de acidez que hay en tu boca y es diferente en cada persona y es un factor de riesgo para padecer de caries.

Existen cuatro fases en las que se desarrollan la caries, hasta producir la destrucción del diente:

• Primera fase: es donde las caries empiezan a desarrollarse, en este punto el daño se produce en la parte más superficial y dura del diente, el esmalte, por esto es común que no se sienta dolor en este punto.
• Segunda fase: los dientes están compuestos de una sustancia llamada dentina y en esta fase esa área es la más afectada y comienza a aparecer el dolor.
• Tercera fase: a partir de aquí la caries avanza más rápidamente y alcanzará la pulpa dentaria, donde se encuentran los nervios y vasos sanguíneos del diente.
• Cuarta fase: es la más crítica, ya que la caries alcanzará los ligamentos periodontales, que unen el tejido al hueso, permitiendo que se formen abscesos e incluso provocar que el diente se desprenda.

Los síntomas de las caries van a depender de la fase en la que se encuentre:

• En la primera fase no existe ningún tipo de molestia.
• A partir de la segunda fase comienza el dolor en las muelaso dientes al consumir alimentos fríos, calientes y sobre todo, dulces.
• En la tercera fase es aún más doloroso y pueden observarse pequeños hoyos en los dientes.
• Si la caries llega a la cuarta fase se formarán abscesos y pueden producirse desprendimientos del diente.

Para tratar las caries o dientes picados, lo principal será conocer la fase en la que se encuentra.

Para la primera y segunda fase el tratamiento será el siguiente:

• Amalgamas: lo que se hace es eliminar la parte que se encuentra cariada y se reemplaza con una aleación que puede ser de plata, oro, resina o porcelana que se solidifican inmediatamente.

En la tercera fase se colocará el siguiente tratamiento:

• Endodoncia o tratamiento de conducto: en este caso se desinfecta la raíz del diente, extrayendo el nervio y el tejido vascular. Se procede a rellenar el diente con material sellante y generalmente es necesario realizar una corona dental que se utilizan, ya sea para mejorar el aspecto del diente o para volver a lograr su estructura funcional.

La cuarta fase constará del siguiente tratamiento:

• Implante dental: como el daño en el diente es total, será necesario quitarlo completamente y sustituir por un implante o diente artificial, fabricado de materiales que no producen rechazo y posibilita que se una al hueso.

Imagen: laser2000dental.com

Lo mejor que podemos hacer para prevenir las caries es mantener una correcta higiene bucal, sin embargo también existen otras medidas a las que debemos prestar atención:

• Visita a tu odontólogo cada 6 meses para realizar una limpieza profunda.
• Cepilla tus dientes por lo menos 3 veces al día, usa el hilo dental y un enjuague bucal .
• Enjuaga tus dientes después de comer alimentos viscosos y masticables.
• Evita consumir bebidas azucaradas.
• Consume alimentos ricos en flúor como el salmón, bacalao, queso, espinacas, avena, nueces y almendras.
• Evita los snacks, ya que contienen azúcar en su composición y estos se convertirán en ácido, dañando el esmalte dental.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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