Curar llagas en la boca

Las aftas en la boca, que suelen presentarse en la parte interna de los labios, las mejillas o en la lengua,son bastante comunes en pacientes que tienen una ortodoncia, pues el roce constante con el aparato fomentan en gran medida la aparición de estas lesiones. Sin embargo fuera de este escenario, son varias las causas de las llagas de la boca, entre ellas destacan:

• Morderse al comer o hacerse daño con un utensilio, lo que ocasiona una lesión que podría convertirse en afta.
• Un diente picado o una prótesis dental más ajustada que hiere la zona.
• Consumir muchos alimentos cítricos, pues el ácido de estos ingredientes podría fomentar lesiones en las zonas propensas a llagas.
• Cambios hormonales.
• Contar con un sistema inmune debilitado puede ocasionar este problema. Las personas con enfermedades autoinmunes o que están llevando a cabo tratamientos que afectan las defensas, como la quimioterapia, son propensos a estas lesiones bucales.
• Falta de nutrientes como la vitamina B12 o el ácido fólico y algunas condiciones gastrointestinales como la enfermedad de Crohn o la celiaquía pueden contribuir a su aparición.
• Además padecer de una gran tensión y estrés también puede aumentar la posibilidad de aftas, pues el sistema inmune se debilita en situaciones de tensión elevada.

Debido a que son muchas las razones que pueden conllevar a la aparición de estas lesiones, se recomienda visitar a un médico si las mismas se presentan de manera frecuente y sin una causa clara.

No basta solo con optar por algunos remedios caseros, si quieres curar las llagas o favorecer su rápida sanación es importante que evites todo aquello que pueda incrementar las molestias y el escozor, por eso se recomienda:

• No ingerir alimentos o bebidas muy calientes.
• Evitar los alimentos muy condimentados o picantes, pues pueden incrementar el malestar.
• Evita los cítricos, que pueden incrementar el escozor.
• Consume alimentos suaves que no te hagan daño y evita aquellos crujientes o crocantes que podrían causarte un daño mayor.
• Los alimentos fríos, como los helados, pueden ayudar a aliviar las molestias, sin embargo se recomienda no optar por sabores cítricos.
• No mastiques tabaco y, de ser posible, evita incluso fumar.

Las aftas suelen desaparecer por sí solas entre una semana y 10 días, sin embargo mientras más cuidadosos seamos más pronto cicatrizarán. En el caso de tener una ortodoncia se recomienda el uso de cera para evitar que el aparato roce constantemente con la lesión.

Uno de los mejores aliados para evitar la formación de bacterias y reducir la inflamación de las llagas es el bicarbonato de sodio, que además es una alternativa simple y barata. Puedes aplicarlo de dos formas: directamente en la zona o a modo de enjuague bucal.

Realiza una pasta con bicarbonato y un poco de agua, coloca con un hisopo un poco de la pasta en la zona afectada, dejando actuar durante 5 minutos. Luego enjuaga con agua fría, puedes repetir 3 veces al día. También puedes hacer un enjuague con un vaso de agua tibia y una cucharadita de bicarbonato, enjuaga bien tu boca con esta mezcla y luego deja actuar, sin aclarar con agua. Puedes repetir 3 veces al día.

Si tienes a mano un bote de agua oxigenada entonces también tienes una solución ideal para curar las llagas. Como ya debes saber este producto ayuda a limpiar lesiones y evitar posibles infecciones por bacterias, por lo que es muy favorecedor en caso de aftas.

Simplemente debes mezclar dos partes iguales de agua oxigenada y agua común, luego aplica la mezcla en la zona con un hisopo. Repite 3 veces al día hasta que la lesión comience a curarse.

Al igual que el bicarbonato de sodio, la sal es un poderoso antiséptico que además todos tenemos a mano en casa, por lo que se trata de una de las soluciones comúnmente más empleadas para esta condición. El modo de usarlo no podría ser más simple, solo deberás añadir a un vaso de agua preferiblemente tibia una cucharadita de sal, remueve y enjuaga tu boca con la mezcla pasándola especialmente por la zona en la que se encuentra el afta.

Puedes repetir 3 veces al día hasta que comiences a notar una mejoría.

El hielo no te ayudará propiamente a curar las llagas pero sí hará que el dolor se reduzca y que la inflamación disminuya notablemente, por eso puedes aplicar un cubito de hielo en la zona afectada durante algunos minutos o hasta que el mismo se derrita. Hazlo varias veces al día, cada vez que necesites alivio.

Prevenir las aftas es posible siguiendo algunas simples recomendaciones cotidianas que te ayudarán a garantizar la salud de tu boca. Por eso en ONsalus te sugerimos:

• Masticar tus alimentos de forma lenta para evitar las lesiones por mordidas.
• No ingerir alimentos o bebidas muy calientes, pues pueden causar lesiones y molestias.
• Llevar una dieta balanceada en la que se incluyan nutrientes y vitaminas. Una dieta deficiente puede fomentar la aparición de llagas y debilitar nuestro sistema inmune.
• Si eres propenso a esta condición emplea un cepillo de cerdas suaves para evitar hacerte daño.
• Mejora la salud de tu sistema inmune llevando una dieta balanceada, realizando ejercicio con frecuencia e ingiriendo alimentos probióticos como el yogur, el kéfir, los encurtidos o el chocolate negro.
• Ante cualquier molestia con un diente, prótesis o con los brackets no dudes en acudir de inmediato al dentista.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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