Labio leporino y paladar hendido: causas y tratamiento

Las causas del labio leporino y paladar hendido se deben a una combinación de factores genéticos y ambientales, como el uso de medicamentos, alcohol y tabaco durante el embarazo; existen mayores probabilidades de padecer de esta condición, si hay antecedentes en tu familia. Durante los tres primeros meses de embarazo, el paladar superior y el labio se unen, cuando esto no ocurre, se cree que es por factores que reaccionan con ciertos genes e interfieren en el desarrollo normal del labio y el cierre del paladar.

Por otro lado existen tres tipo de hendiduras:

• Labio leporino sin paladar hendido.
• Paladar hendido sin labio leporino.
• Labio leporino y paladar hendido

Además de la apariencia física, el labio leporino y paladar hendido presenta otros problemas, esto tiene que ver con la forma y extensión de la hendidura y la fisura:

• Cambios en la forma de la nariz.
• Dientes desalineados.
• Fisura del labio que va hasta la base de la nariz.
• Paladar hendido a ambos lados o en toda su extensión.
• Campanilla bífida (dividida en dos).

Esta condición puede traer complicaciones como:

• Problemas para aumentar de peso.
• Flujo de leche a través de la nariz cuando el bebe se alimenta.
• Infecciones de oído constantes.
• Retardos en el crecimiento.
• Dificultades en el desarrollo del habla.

El labio leporino y paladar hendido se puede diagnosticar en una ecografía prenatal. La buena noticia es que esta condición puede ser tratada a través de una cirugía reconstructiva que se lleva a cabo cuando el niño tiene entre 12 y 18 meses. Esta consiste en extraer tejido de ambos lados de la boca y de esta forma reconstruir el paladar, la idea de esta intervención es reducir los problemas de salud que esto conlleva.

Es posible que se tenga que realizar otra cirugía a lo largo de la vida del niño, pero todo dependerá de lo grave que sea la hendidura o si tienen un efecto significativo sobre el área de la nariz. Es necesario que el niño que tiene esta condición, reciba tratamiento de ortodoncia, ya que esto facilita el proceso del habla en caso que se produzcan desalineaciones en de los dientes.

Los niños con esta condición tienen más probabilidades de perder la audición porque se acumula líquido en sus oídos, ya que las trompas de eustaquio no drenan correctamente el líquido que va del oído medio a la garganta.

Por otro lado la alimentación puede ser una complicación, en el caso del labio leporino dificultará que el bebé succione la leche del pecho de la madre y el paladar hendido hará que esta se vaya a la cavidad nasal. De todas formas tu médico te indicará algunos dispositivos que te pueden ayudar a facilitar la alimentación del bebé.

La mayoría de los niños tienen una recuperación bastante satisfactoria, se debe ser muy estricto con las visitas al odontólogo y los exámenes del oído, para detectar a tiempo cualquier problema. Por otro lado es recomendable acudir a un logopeda en caso de que el nño tenga problemas de habla después de la cirugía.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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