Parches anticonceptivos: uso y efectos secundarios

El parche anticonceptivo es una especie de apósito o adhesivo cuadrado de color crema que se adhiere a la piel y que va liberando hormonas estrógeno y progestina, las cuales entran en la circulación sanguínea a través de la epidermis e impiden que los ovarios liberen los óvulos, evitando de esta manera los embarazos no deseados. Además de esto, también hace que la mucosa cervical se vuelva más gruesa para que bloquee al esperma y los espermatozoides no puedan llegar hasta el óvulo y fecundarlo.

Se trata de un método anticonceptivo hormonal que funciona de manera similar a las pastillas anticonceptivas y que si se emplea de forma correcta, al segundo día de su aplicación, todos sus componentes se habrán absorbido adecuadamente y se dispondrá de una protección segura y efectiva durante todo el ciclo menstrual.

Es muy importante usar correctamente el parche anticonceptivo para que su eficacia no se vea reducida y pueda brindar la protección adecuada. Debes saber que en cada caja que compres, encontrarás 3 parches, uno para cada semana, pues en la semana número 4 no se debe usar porque es cuando se presentará la menstruación. El primer parche tienes que colocártelo durante las primeras 24 horas una vez ha empezado la menstruación y deberás sustituirlo por uno nuevo cada semana, aplicándolo siempre el mismo día.

A continuación, detallamos los pasos que se deben seguir para colocar el parche anticonceptivo, pero si tienes dudas consulta con tu farmacéutico o médico para no correr riesgos innecesarios:

• Abre con cuidado el envoltorio del parche, sácalo y despega la cubierta de plástico transparente que tiene hasta la mitad, evitando no tocar la parte adhesiva.
• Pégalo sobre la piel de la zona en la que quieras llevarlo, retirando la otra mitad del plástico y presionándolo con firmeza contra la piel por unos 10 segundos para que quede perfectamente adherido. Es aconsejable colocarlos en zonas como los glúteos, el abdomen, la parte superior del tronco (evitando los senos) o la parte superior y externa de los brazos, asegurándote también de que en ella no hay mucho vello que pueda perjudicar su eficacia.
• Es muy importante que la piel de la zona elegida para llevar el parche, esté limpia y seca, libre de cremas, lociones o aceites corporales.
• Lleva el parche puesto en esa zona durante una semana y, una vez pasada, retíralo y reemplázalo por uno nuevo siguiendo el mismo procedimiento de colocación.
• No tires el parche antiguo al water, introdúcelo en un bolsita o envuélvelo con un trozo de papel higiénico y desecha en la basura.

Además, para potenciar sus efectos, te aconsejamos que alternes las zonas de colocación y lo lleves en partes distintas cada semana, así también protegerás tu piel de posibles irritaciones. Mantén la caja de los parches en un lugar seco y oscuro alejada por completo de los rayos directos del sol.

La eficacia del parche anticonceptivo es una de las cuestiones que más preocupan a las mujeres que optan por prevenir los embarazos no deseados mediante este método. Pues bien, debes saber que si el mismo se utiliza de manera adecuada proporciona una eficacia casi del 99%, eso sí esta puede verse enormemente reducida si no se ha colocado a tiempo, si se ha despegado o si se ha permanecido más de 24 horas sin él.

¿Qué hacer si el parche se despega?

Te recomendamos que cada día revises el estado del parche y te asegures de que está bien adherido a la piel. En el caso de que veas que se ha despegado parcialmente, es fundamental que lo retires y vuelvas a colocarlo correctamente si aún no han pasado 24 horas. Si, por el contrario, se ha despegado por más de 24 horas, deberás colocarte uno nuevo e iniciar un nuevo ciclo de cuatro semanas.

Además de esto, es conveniente utilizar un método anticonceptivo adicional como el preservativo masculino o femenino durante los siguiente 7 días. También es conveniente recordar que el parche es un método que no proporciona protección contra las enfermedades de transmisión sexual, por lo que en este sentido es importante extremar las precauciones.

La utilización del parche anticonceptivo puede afectar de manera distinta a cada mujer y al tratarse de un método hormonal, puede conllevar alguno o algunos de los efectos secundarios que mostramos a continuación:

• Reacciones alérgicas locales o irritación en la piel sobre la que se ha adherido.
• Dolores de cabeza.
• Dolores o inflamación en los senos.
• Náuseas o vómitos.
• Retención de líquidos ocasional.
• Manchas o sangrado entre menstruaciones.

Generalmente, si se manifiestan síntomas de este tipo, estos tienden a reducir a los 3 meses del uso del parche, pero si perduran o se manifiestan de manera intensa, lo mejor será consultar con el médico, pues es posible que sea preferible optar por la utilización de otro método anticonceptivo.

Además, es importante que antes de empezar a usar el parche te asegures de si puede ser perjudicial para tu estado de salud, y es que su empleo está desaconsejado en los siguientes casos:

• Mujeres embarazadas o con sospechas de poder estarlo.
• Mujeres mayores de 35 años y fumadoras.
• Tener antecedentes familiares de ataques cardíacos o embolia.
• Padecer cáncer.
• Tener una presión arterial alta.
• Ser diabética.
• Tener problemas de coagulación sanguínea o de inflamación de las venas.
• Padecer enfermedades hepáticas graves.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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