¿Por qué tengo el pene curvo?

La curvatura del pene es un hecho completamente normal, que la mayoría de hombres experimentan, y la cual no conlleva a ningún síntoma más allá de que pueda resultar un problema estético. El pene puede incrementar su curvatura a lo largo del tiempo, pero en el caso del pene curvo considerado como normal, nunca derivará en problemas que impliquen dolor, disfunción eréctil u otros síntomas que afectan a la salud del hombre. Se trata de una condición que puede darse en más o menor medida, y la curvatura puede ser hacia cualquiera de los dos lados. Por ello, el pene curvo puede suponer un complejo para el hombre y hacer que se sienta incómodo al mostrarlo en las relaciones sexuales. Por ello, hay que ser consciente de que se trata de algo común, e intentar no darle más importancia de la que realmente tiene.

Como hemos explicado en el punto anterior, la curvatura en el pene es un hecho habitual en los hombres, pudiendo ser más o menos acentuada. Sin embargo, hay otra causa que podría ocasionar problemas en el aspecto del pene y también en la salud sexual del hombre, conocida como la enfermedad de Peyronie. En este caso, ya no hablamos de pene curvado, sino de pene torcido, puesto que es más acentuado. En los dos casos se trata de una curvatura del pene, lo que varía es la intensidad y los síntomas que implica.

El pene está formado por unos cuerpos cavernosos, encargados de llenarse de sangre para que se produzca la erección. Estos cuerpos cavernosos están rodeados de un tejido elástico conocido como túnica albugínea. La enfermedad de Peyronie tiene lugar cuando se produce fibrosis en este tejido elástico, es decir, se forma una cicatriz que implica la pérdida de elasticidad del pene, por lo que en el momento en el que está erecto, este no logra que toda su estructura permanezca recta, sino que el pene se dobla hacia la dirección de la cicatriz.

La cicatriz que provoca esta torcedura del pene, supone diversos síntomas que afectan a la salud sexual del hombre:

• Dolor en el pene durante la erección. Su intensidad puede variar en función del grado de afección que suponga la fibrosis.
• Deformidad del pene. La torcedura en el pene se acentúa considerablemente durante la erección, motivo por el cual los hombres suelen alarmarse. Puede producirse hacia los lados, aunque es más frecuenta que sea hacia abajo.
• Disfunción eréctil. Los problemas de erección pueden ser un síntoma directo de la enfermedad, pero también puede derivar en problemas psicológicos del hombre al tener complejos por la curvatura del pene.

El diagnóstico de la enfermedad de Peyronie se realiza mediante una exploración física y es fácilmente detectable. Tras consultar los datos básicos sobre el paciente, se debe detectar si este presenta una curvatura en el pene, zonas endurecidas o dolor durante la erección. La presencia de estos factores permitirán reconocer la existencia de la enfermedad y el motivo por el cual el paciente tiene el pene curvo. También se pueden realizar otras pruebas en los casos en los que el diagnóstico no sea del todo claro, como una ecografía, radiografía y resonancia magnética.

Los tratamiendos existentes para curar la enfermedad de Peyronie y lograr que la persona note mejoras en cuanto al pene curvo, puede ser mediante vía oral o intralesional. En el primero, se administran una serie de fármacos con el fin de diminuir la placa fibrosa, es decir, las zonas endurecidas. Otros fármacos también permiten reducir ligeramente la curvatura del pene. En el caso del tratamiento vía intralesional implica la administración de medicamentos directamente en las placas fibrosias, permitiendo reducir la curvatura del pene, la cantidad de placa fibrosa y el dolor. Se trata de un tratamiendo considerado seguro que es tolerado por la mayoría de pacientes.

Por otro lado, el tratamiento quirúrgico se realiza en aquellas personas en las que la tener el pene curvo les supone un problema en su vida sexual, impidiendo la penetración y produciendo dolor. La cirugía debe aplicare en el momento adecuado y mediante las técnicas convenientes.

Otro de los motivos, dejando de lado la enfermedad de Peyronie, por los que una persona puede tener el pene torcido, es debido una curvatura congénita, es decir, con la que se nace. Se puede observar en las primeras erecciones y puede irse incrementando a medida que el pene se desarrolla. Esto se produce cuando la uretra es más corta respecto a la longitud de los cuerpos cavernosos presentes en el pene, lo que genera la rigidez y que este se doble hacia uno de los lados o hacia abajo.
En estos casos no existe la presencia de placa de fibrosis y no se producen los síntomas de la enfermedad de Peyronie, como disfunción eréctil o dolor. Sin embargo, es posible que la incurvación adquiera una elevada intensidad, pudiendo derivar en problemas sexuales, siendo poco frecuente. En estos casos se aplicaría una cirugía similar a la de la enfermedad de Peyronie.

Teniendo en cuenta los aspectos tratados en este artículo, una persona debería acudir al médico cuando detecta que el pene torcido también supone otros problemas, como dolor y disfunción eréctil, afectando a la vida de la persona que lo padece. Recuerda que la curvatura del pene es normal, por lo que si no presentas ninguno de estos síntomas ni ningún otro problema más allá de la curvatura del pene, la decisión de acudir a un especialista será únicamente para corregir el problema desde un punto de vista estético.

En este artículo puedes consultar las causas de una erección dolorosa.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

Si deseas leer más artículos parecidos a ¿Por qué tengo el pene curvo?, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Sistema reproductor masculino.