Atrofia vaginal: causas, síntomas y tratamiento

Atrofia vaginal: causas, síntomas y tratamiento

La atrofia vaginal, llamada también vaginitis atrófica, es una alteración que se caracteriza por un adelgazamiento considerable de las paredes de la vagina y por una gran disminución de su lubricación, lo que provoca una gran sequedad en la zona y, al mismo tiempo, inflamación vaginal.

Su causa principal es una disminución de estrógenos, es decir, la hormona sexual principal femenina. Esto hace que sea una patología muy frecuente en las mujeres durante la menopausia y puede llegar a afectar en la funcionalidad sexual y calidad de vida. Por ello, es importante que te realices revisiones médicas de forma habitual, ya que si no se realiza el tratamiento adecuado, los síntomas pueden perdurar por mucho tiempo.

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Causas de la vaginitis atrófica

La principal causa de la atrofia vaginal es una gran disminución de los niveles de estrógenos en la sangre, es decir, de las hormonas sexuales femeninas que son producidas en gran parte por los ovarios y, en menor cantidad, por las glándulas suprarrenales, que se encuentran situadas arriba de los riñones, haciendo la función de la síntesis hormonal, aunque durante el embarazo la placenta también se encarga de sintetizar estrógenos.

Entre las numerosas funciones de los estrógenos, se destacan las de favorecer significativamente al engrosamiento de la pared vaginal, aportar diferentes nutrientes y facilitar muy notoriamente la lubricación vaginal. Es por esto que todos los trastornos en los que existe una disminución de los niveles de estrógenos causa la atrofia vaginal, por ejemplo, la menopausia.

La vagina cuenta con una gran cantidad de receptores para los estrógenos, lo que hace que cuando los mismos disminuyen la función normal de la vagina se vea alterada. De esta forma, se produce el adelgazamiento de las paredes en la misma, un aumento en su pH, una disminución de la secreción, lubricación vaginal y, al mismo tiempo, del aporte sanguíneo a esta.

Principales síntomas de atrofia vaginal

En algunas ocasiones la atrofia vaginal no produce ningún síntoma; sin embargo, cuando es sintomática puede observarse claramente una menor lubricación vaginal, es decir, la sequedad en la vagina, el cual es el indicio más frecuente y muchas mujeres no se hacen revisar cuando esto aparece, lo que provoca que el síntoma pueda durar varios años.

Dolor o molestias en la vagina mientras se tienen relaciones sexuales también es un síntoma de vaginitis atrófica. Esto se conoce como dispareunia y puede estar asociada a una pérdida del interés sexual. Esta condición suele afectar a un 15% de mujeres en edad fértil, mientras que aumenta a un 50% en mujeres mayores a 50 años.

El ardor vaginal constante o al orinar, pequeños sangrados vaginales, principalmente luego de las relaciones sexuales, y un prolapso vaginal son otros de los síntomas que puedes notar si estás sufriendo de atrofia vaginal. En el siguiente artículo podrás encontrar las causas y tratamientos de la comezón en la vagina.

Tratamiento para aliviar la vaginitis atrófica

La atrofia vaginal es un trastorno muy frecuente y, en muchas ocasiones, difícil de prevenir, ya que se trata de una consecuencia de la evolución natural de las hormonas femeninas a lo largo de toda su vida. Para aliviar los síntomas que produce esta alteración existen dos tratamientos que se dividen en no hormonal y hormonal:

  • En el tratamiento no hormonal para las mujeres que tienen vaginitis atrófica se destacan dos elementos indispensables, los hidratantes y los lubricantes vaginales. Los primeros no disminuyen la atrofia de las paredes de esta zona del cuerpo, pero mejoran la sequedad que produce esta patología. Mientras que los lubricantes, como un añadido a los hidratantes, se utilizan antes de mantener relaciones sexuales. Este método combinado está recomendado para las mujeres que cuentan con síntomas leves o moderados; sin embargo, es indispensable que consultes con un especialista para que te otorgue el tratamiento que corresponda a tu condición. En el siguiente artículo te explicamos cómo elegir lubricante vaginal.
  • Por otra parte, el tratamiento hormonal para la atrofia vaginal se receta cuando la sintomatología existente en la paciente es moderada o severa y no cede con el tratamiento del tipo no hormonal. Su administración puede ser a nivel local o sistémico, pero el médico generalmente opta por la aplicación local de estrógenos en alguna de sus presentaciones, como en ungüento o tabletas, ya que una pequeña dosis suele ser suficiente para aliviar los síntomas, además de que es poco probable que cause efectos adversos. Mientras que, en casos de síntomas severos la mejor opción es la administración a nivel sistémico, aunque suele evitarse por el alto riesgo de desarrollar complicaciones.

Realizar el tratamiento hormonal a base de estrógenos puede tener importantes efectos secundarios, entre ellos una hemorragia uterina, por lo que es indispensable que lo consultes con un médico y le comentes todas las dudas que tengas, además de seguir únicamente el tratamiento indicado por el mismo.

Factores de riesgo para atrofia vaginal

Si bien la vaginitis atrófica es bastante difícil de prevenir, existen factores de riesgo que aumentan considerablemente la probabilidad de que lo padezcas, por ejemplo:

  • Consumir ciertos fármacos que reducen los niveles de estrógenos, como los que se utilizan para el tratamiento del cáncer de mama.
  • Haber realizado radioterapia o quimioterapia sobre la parte pélvica.
  • Haber tenido una extirpación ovárica.
  • No haber tenido un parto por vía vaginal.
  • Consumir tabaco en exceso.
  • Haber realizado ejercicio físico de forma intensa y constante.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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