Es común que las personas exploren y estén al pendiente de cualquier alteración en el rostro, por ello es más fácil detectar la aparición de protuberancias o bultos y aunque en muchos casos no dé les de importancia, suelen indicar algún problema, especialmente si se ubican en la zona del cuello o cercano a la oreja.
Son varias las causas que podrían originar la presencia de bultos debajo de la oreja, pero en la mayoría de los casos estas no representan una condición de peligro y con el tratamiento adecuado pueden resolverse sin complicaciones. Es importante que visites al médico para realizar el correcto diagnostico, pero además en ONsalus queremos informarte sobre las causas de los bultos debajo de la oreja.
Inflamación de los ganglios linfáticos
Los ganglios linfáticos se distribuyen en varias zonas del cuerpo, principalmente en el cuello, y tienen la importante función de retener agentes externos que podrían ocasionar algún daño dentro del organismo, actuando como un filtro para después eliminarlos. Sin embargo, cuando estos agentes dañinos llegan a acumularse desatan una reacción irritante provocando que se inflamen los ganglios afectados, haciéndolos perceptibles al tacto con la posibilidad de incrementar su tamaño y hacernos sentir molestias o dolor.
En la mayoría de los casos cuando se detecta un bulto debajo de la oreja suele ser por la inflamación de algún ganglio linfático cercano, esta afección también se le conoce como adenopatía. Frecuentemente no representa una condición grave y suele ser a causa de alguna infección, ya sea por virus, bacterias, parásitos o la ingesta de algún medicamento, no obstante es importante que consultes al médico para un correcto diagnostico y te indique el tratamiento adecuado. En nuestro artículo inflamación de los ganglios linfáticos: causas y tratamiento te explicamos todo acerca de esta patología.
Inflamación de la glándula parótida
Dentro de las glándulas salivales, las glándulas más grandes son las parótidas, ubicadas una en cada lado de la cara, debajo y en frente de las orejas. Se encargan de producir la saliva, al igual que las otras glándulas salivales, y la secreta en la boca a través de un conducto por detrás de los dientes superiores, ayudando en la masticación y degradación de los alimentos, además de mantener húmeda la cavidad bucal y sus componentes.
Las glándulas parótidas se pueden verse afectadas por ciertos tipos de infecciones, las ocasionadas por virus como las paperas, o por la proliferación de bacterias a causa de una deficiente higiene. También es posible que se deba a otras condiciones, como el síndrome de Sjogren, una enfermedad autoinmune que ataca principalmente a las glándulas exocrinas. Al haber una alteración en las glándulas parótidas se desarrolla una inflamación que produce un fuerte dolor en la cara, por lo que esta puede ser otra causa de un bulto debajo de la oreja.
Desarrollo de quistes sebáceos cerca de la oreja
Cuando el bulto debajo de la oreja tiene una consistencia blanda, produce poco o nada de dolor, la piel que lo recubre suele estar enrojecida y es fijo, es indicativo de un quiste sebáceo o quiste epidérmico. Este quiste se origina frecuentemente por la obstrucción de algún folículo piloso o conducto de las glándulas sebáceas en la piel, la obstrucción suele ser por la remoción de capas de queratina en la dermis o por alguna lesión, provocando la acumulación de grasa debajo de esta.
La formación de capas en la superficie del conducto más el aumento en la acumulación de grasa dentro del saco que se forma por debajo de la piel, hacen que el bulto incremente su tamaño. Generalmente estos quistes presentan un poro por el cual pueden ingresar microorganismos al interior del saco e infectarlo, llenándolo de pus. Muchos de los casos se dan en personas adultas y la probabilidad de desarrollarlos es mayor si se padece de acné. Dependiendo del estado del quiste el tratamiento puede variar, sin embargo es importante destacar que estos no llegan a ser peligrosos.
Lipoma debajo de la oreja
La presencia de lipomas no es razón para alarmarse, ya que este tipo de tumor no es canceroso y suele resolverse sin complicaciones. Es una afección más común de lo que se piensa y puede ser una causa de bultos debajo de la oreja, se diferencia de otros tipos de protuberancias por su consistencia blanda y gomosa, porque son movibles por debajo de la piel, no tiene un poro que lo comunique con el exterior y es de crecimiento lento, muchas veces sin ningún tipo de síntoma.
El lipoma debajo de la oreja se desarrolla a partir de la producción excesiva de las células grasas en el tejido adiposo, almacenando una masa de grasa debajo de la piel que puede seguir incrementando su tamaño. No se tiene certeza de qué lo ocasiona, pero se considera que algunos factores pueden favorecen su presencia, como el sobrepeso u obesidad, variación anormal del nivel de glucosa en la sangre, enfermedades del hígado, lesiones y la ingesta en exceso de bebidas alcohólicas.
Tumor de la glándula parótida
Un tumor en la glándula parótida puede ser otra causa de sentir un bulto debajo de la oreja, aunque no es muy común que esto ocurra, pero es el tumor más frecuente dentro de las glándulas salivales. En más del 80% de los casos el tumor no es canceroso, como el tumor de Warthin, pero también es posible que sea maligno y lleve un tratamiento más prolongado.
Este bulto debajo de la oreja puede sentirse como una masa o inflamación dura, generalmente no produce dolor, crece lentamente y no suele ser muy grande. Cuando existen síntomas, puede haber sensación de adormecimiento o molestias persistentes en la zona afectada de la cara y dificultad para tragar o para abrir totalmente la boca.
No se ha definido qué origina algún tumor en la glándula parótida, pero el riesgo de padecerlo incrementa si la persona ha estado expuesta a radiación, frecuentemente por tratamiento de cáncer en la cabeza o cuello, también es posible si fuma en exceso o al trabajar con ciertas sustancias, como las empleadas en la industria del hule, la plomería o la extracción de asbesto. No obstante, puede desarrollarse sin haber una causa aparente.
Es necesario acudir al médico para llevar un control y el tratamiento adecuado de la afección, aunque dependiendo del estado del tumor puede ser recomendable la extracción de la glándula parótida, ya que un importante nervio facial podría verse comprometido.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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