Cómo se contagia el coronavirus y cómo prevenirlo

El coronavirus, o neumonía de Wuhan, del que tanto se habla estos días es conocido en el mundo científico como 2019 novel coronavirus (2019-nCoV). Puede causar distintos síntomas, los cuales son similares a los de otras neumonías virales, entre ellos:

• Fiebre (más de 38°C) durante los primeros días.
• Tos.
• Dolor en el pecho.
• Falta de aire.
• Cansancio.
• Dolores musculares.
• Síntomas menos frecuentes: tos con secreciones, tos con sangre, diarrea.
• Menos frecuente aún son los síntomas de la vía aérea superior: estornudos, secreción nasal, sensación de nariz tapada, dolor de garganta.

En pacientes que padezcan otras enfermedades o sus defensas sean bajas, los síntomas pueden ser peores.

En pocos casos puede llegar a causar una enfermedad severa que, si no es diagnosticada y tratada a tiempo, puede causar la muerte. No obstante, esto también sucede en otras enfermedades virales a las que estamos más acostumbrados: se habla de que la mortalidad es del 3% solamente.

Por lo tanto, crear una alarma y difundir información para asustar no es correcto, si bien es bueno saber qué sucede en el mundo, desatar un pánico global no es serio ni responsable por parte de quien tiene en sus manos informar.

Solo puede sospecharse de coronavirus si existen los vínculos epidemiológicos que sugieran que la persona pudiera haber estado en contacto con alguien enfermo (ver apartado de formas de contagio). En esa situación, además de aislar al paciente, se realizan pruebas para determinar si esa es la causa real, lo cual es importante para seguir el rastro de la infección.

El coronavirus afecta tanto a humanos como a otros mamíferos, aves y animales salvajes. Existen seis tipos diferentes que afectan de manera leve a personas previamente sanas y se transmiten de unos a otros por las gotitas de estornudos, respiración y secreciones, pero el coronavirus que está actualmente causando nuevos casos es diferente, ya que se trata de un virus zoonótico, es decir, que puede transmitirse entre animales y seres humanos.

Esto sucede con otros dos tipos parecidos de coronavirus: los que que causan el síndrome agudo respiratorio severo y el síndrome respiratorio del Medio Oriente, que se transmiten directamente desde murciélagos o mediante intermediarios (como los camellos). Esta nueva mutación del coronavirus (2019-nCoV) pareciera transmitirse de igual manera, ya que su estructura es muy parecida a ellos, pero la enfermedad que genera es más suave en cuanto a síntomas y complicaciones.

El 31 de diciembre de 2019 en Wuhan (China) se reportaron una serie de casos entre personas que estaban vinculadas a mercados húmedos (con productos marinos), y ya una semana después, se logró determinar que el posible causante era este tipo de coronavirus. Durante el siguiente mes, se reportaron más casos. Hasta el día de hoy, se han diagnosticado enfermos en otras ciudades de China, en países asiáticos y pocos fueron reportados en Australia, Francia, Alemania, Estados Unidos y Canadá.

Por lo que se refiere a los casos reportados, puede enfermar cualquier persona, no hace falta que las defensas estén bajas. La forma de contagio es a partir del contacto directo con las secreciones de las personas que tienen una enfermedad pulmonar bien marcada (con muchos síntomas), y no solo por estar cerca de alguien con síntomas leves (como estornudos o resfriado). De todas maneras, el estudio de la transmisión del coronavirus continúa en estudio.

Lo más importante para evitar el contagio de coronavirus es la forma en la que la comunidad médica está trabajando al respecto:

• Observando un correcto manejo de los pacientes con síntomas respiratorios: aislamiento, uso de protección para tratarlos y tratar sus secreciones.
• Identificando otras posibles formas de contagio del coronavirus.

De esta manera, la enfermedad puede limitarse a menos personas, que es lo más importante.

El tratamiento del coronavirus consta de varios objetivos: mejorar los síntomas, tratar de disminuir el efecto del virus en el cuerpo y evitar sobreinfecciones, para lo cual se tienen en cuenta las siguientes medidas y se aplican distintos fármacos de acuerdo al caso y a la evolución del paciente:

• Aislamiento del paciente.
• Controlar la fiebre.
• Mantener una correcta hidratación.
• Controlar que el aporte de oxígeno sea adecuado.
• Se ayuda a la expulsión de las secreciones.
• Administración de antibióticos (orales, endovenosos).
• Administración de oseltamivir (antiviral).
• Colocación de corticosteroides.

Y debido a que ya se conoce la estructura del virus, se están buscando nuevos posibles tratamientos para los enfermos y vacunas para prevenir el contagio de coronavirus en la población.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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