Condilomas acuminados: contagio, síntomas y tratamiento

Condilomas acuminados: contagio, síntomas y tratamiento

Los condilomas acuminados, conocidos popularmente como verrugas genitales, son una de las infecciones más comunes por algunos tipos de VPH, es decir del virus de papiloma humano, una enfermedad de transmisión sexual. Se estima que al menos la mitad de las personas que llevan una vida sexual activa se infectan con el virus que provoca las verrugas genitales.

Como su nombre lo indica, las verrugas genitales generan una afección en los tejidos húmedos que se encuentran en la zona genital. Estos abultamientos en las zonas íntimas suelen parecer protuberancias de color carne y de tamaño variable, en algunos casos las verrugas son tan pequeñas que no es posible observarlas a simple vista. Los abultamientos no duelen y pueden salir alrededor del ano, en la vagina, los testículos, pene, uretra, ingle o en la parte interior de los muslos.

Si sospechas que puedes tener una infección es indispensable que realices una consulta médica. Mientras tanto, en ONsalus te brindamos toda la información sobre los condilomas acuminados: contagio, síntomas y tratamiento.

Formas de contagio de condilomas acuminados

La condilomatosis genital es considerada una de las enfermedades de transmisión sexual más frecuentes en todo el mundo. Su contagio es producido con los contactos sexuales, hasta el punto de que solamente se puede considerar libre de riesgo a aquellas personas que nunca hayan tenido relaciones sexuales. El contagio de la infección por virus del papiloma humano aparece por el contacto directo con la piel o mucosa en personas que hayan desarrollado condilomas o quienes sólo son portadoras del virus pero nunca han desarrollado algún tipo de síntoma.

La principal vía de transmisión de condilomas acuminados es a través de la penetración vaginal, sin embargo, al practicar sexo anal también puede ocurrir la infección, aunque existe la posibilidad de que el desarrollo de estas verrugas en el ano se deba al escurrimiento de los flujos genitales con el virus hasta la zona. Mientras que, la transmisión por sexo oral o el contacto digital-genital es poco frecuente.

Por otro lado, estas verrugas genitales durante el embarazo pueden ocasionar un contagio vertical, es decir, de la madre al hijo, aunque el riesgo de esto es bajo. Esta infección al bebé puede ocurrir cuando aun está dentro del útero, debido a la propagación de los condilomas o a través de la placenta, durante el parto por el contacto directo con las protuberancias o inmediatamente después del nacimiento por un mal cuidado higiénico del portador.

Asimismo, existen diferentes situaciones que pueden favorecer el contagio de las verrugas genitales, entre ellos se destaca:

  • Practicar sexo con múltiples parejas
  • Iniciar la vida sexual a temprana edad
  • Tener relaciones sexuales sin preservativo
  • Que tu pareja se encuentre infectada por VPH
  • Tener otras enfermedades de transmisión sexual
  • No estar circuncidado
  • Utilizar ropa interior ajena
  • Abusar del alcohol y el tabaco, que por su efecto disminuye las defensas contra estos virus
  • Sistema inmunológico debilitado
  • Tener inflamación crónica del cérvix
  • Múltiples gestaciones
  • Mantener una dieta baja en antioxidantes, vitamina C y ácido fólico.

Las verrugas genitales pueden aparecer de 6 semanas a 6 meses luego del contagio, es decir, después de haber mantenido relaciones sexuales con una persona infectada por VPH, aun cuando la misma no tenga condilomas visibles.

Síntomas de condilomas acuminados

Los condilomas acuminados son abultamientos, llamadas verrugas, que se encuentran localizadas en la zona genital. Estos bultos pueden ser de color carne o de tono grisáceo, de estructura plana o elevada y el tamaño varía desde muy pequeños, casi sin poder percibirse, hasta grandes agrupaciones que se detectan fácilmente y, muchos especialistas, lo describen similar al aspecto de coliflor.

  • Generalmente, en los hombres estas verrugas crecen en la punta o tallo del pene, en el escroto o en el ano. Puede ocurrir que existan verrugas planas que comienzan en el prepucio, extendiéndose hacia el glande y, finalmente, abarcar el escroto y periné, surgiendo condilomas más visibles en las últimas zonas.
  • Por el lado de las mujeres, las verrugas pueden ser planas o no y se encuentran, habitualmente, en la vulva y el área perineal, con la posibilidad de que se propaguen hasta la vagina y el cuello uterino; sin embargo, estas zonas son relativas, aunque podrían desarrollarse también en el muslo o la ingle y, en quienes han practicado sexo oral con una persona infectada, puede llegar a afectarles la garganta o la boca.

Si bien, la mayoría de las veces las verrugas genitales no causan dolor, ocasionan otras molestias tales como picazón y ardor en el lugar afectado. Además, otros signos de condilomas acuminados que podrían sufrirse son sangrado durante el coito o que haya un flujo vaginal anormal, en exceso y de color blanco o amarillento.

Tratamientos para curar los condilomas acuminados

Existen varias alternativas para el tratamiento del condiloma acuminado, los cuales están centrados en la eliminación de las verrugas. Entre los métodos más utilizados se destacan los fármacos, que pueden ser medicamentos antivirales o para fortalecer la respuesta del sistema inmune del paciente.

Otra forma es recurrir a alternativas naturales para quitar las verrugas genitales, ayudando a reducir los síntomas, aunque también es posible que estas protuberancias desaparezcan por sí solas después de un tiempo; sin embargo, esto depende de la gravedad de los condilomas por lo que es indispensable que consultes a un especialista antes de realizar cualquier remedio casero que conozcas o dejar que siga su curso, ya que también podrían aumentar su tamaño o número.

Muchos especialistas recomiendan encargarse de las verrugas genitales con electricidad, un escalpelo o con crioterapia, el cual es un procedimiento que se utiliza para congelar las verrugas y que se separen del cuerpo días más tarde.

Por último, está la opción quirúrgica, aunque no suele ser muy común ni recomendable. Es posible que el médico aconseje someterse a cirugías sólo cuando las verrugas son muy grandes y no responden a ningún otro tratamiento, o cuando se trata de condiloma acuminado durante el embarazo, ya que el niño podría entrar en contacto con dichas protuberancias en el parto y contagiarse.

Cómo evitar los condilomas acuminados

Prevenir es la forma más eficaz de protegerte contra las verrugas genitales, es por esto que se recomienda:

  • Lavarse las manos correctamente si se han tocado verrugas.
  • Usar condón durante todo el acto sexual.
  • Mantener relaciones con una pareja libre de virus del papiloma humano o VPH.
  • Evitar el contacto directo con condilomas.
  • Vacunarse contra el VPH.
  • No automedicarse.
  • Evitar fumar y consumir alcohol.
  • Mantener una dieta equilibrada en nutrientes.
  • Realizarse controles médicos con frecuencia.

En el siguiente artículo podrás aprender todo lo que necesitas saber sobre la vacuna contra el VPH.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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