El dolor cervical es una de las dolencias más comunes y es ocasionado por las actividades que realizamos a diario, como dormir en una mala posición, movimientos bruscos del cuello, agacharse etc. En la mayoría de los casos la contractura cervical no está relacionada con enfermedades graves, aunque pueden resultar enfermedades degenerativas o inflamatorias. Se consideran patologías cervicales severas, aquellas donde el dolor neurológico se hace presente. En ONsalus te explicamos cuáles son las causas y tratamientos para la contractura cervical.
Distensión muscular
En periodos de estrés se puede hacer una contracción involuntaria del músculo, el cual se endurece y su función se ve limitada. Ataca sobre todo la espalda, los hombros y el cuello. Los dolores pueden disminuir en un periodo entre tres y seis días. La ansiedad y la depresión también pueden ser factores para esta tensión, así como las malas posturas.
En el caso de la tortícolis, puede ser hereditaria o adquirida por algún daño en el área del cuello, impidiendo que este pueda moverse hacia los lados, también puede producir dolores de cabeza e hinchazón en los músculos.
El latigazo cervical es otra de las lesiones de la distensión muscular, y se produce por accidentes en coche, en este caso la cabeza hace una flexión e inmediatamente se extiende más allá de su alcance normal, afectando tendones, músculos, articulaciones y ligamentos. No es normal que las molestias se extiendan por más de seis meses, a menos de que hubiese una enfermedad degenerativa previa.
Artrosis cervical
Es una enfermedad degenerativa por el desgaste de las vértebras cervicales lo que hace que el dolor en el cuello sea persistente, en casos de mayor gravedad la médula espinal puede verse bastante afectada. Esta dolencia es frecuente en personas mayores de 40 años. Algunos de los síntomas son: crujidos, rigidez y dolor en el cuello que empeora por las mañanas y con los cambios meteorológicos.
Meningitis
Es la inflamación de las meninges o el tejido que rodea el cerebro y la médula espinal. Generalmente es causada por infecciones y es frecuente en niños y adolescentes, si has tenido una combinación de estos síntomas: fiebre repentina, dolor de cabeza muy fuerte y rigidez en el cuello, no dudes en consultar a tu médico para poder tratarla de inmediato, ya que avanza muy pronto y sus consecuencias pueden ser mortales.
Tratamiento
Los tratamientos para estas dolencias dependerán de las causas. Para las distensiones musculares, por lo general la molestia desaparece sola, si el dolor es muy fuerte los antinflamatorios o relajantes musculares, recetados por tu médico, pueden ayudar. Por otro lado la fisioterapia y aplicación de calor también son una opción.
En el caso de las infecciones, la prevención será la clave, y las vacunas serán de gran ayuda. Si se encuentra en el cuadro infeccioso, los antibióticos deberán ser suministrados inmediatamente por el personal médico, también se pueden proporcionar corticoides para tratar el edema cerebral producido a causa de la infección, así como la deshidratación y las convulsiones.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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