Cuando nace un bebé el médico tiene en consideración diversos aspectos del mismo para evaluar de forma básica el estado de salud general con el que ha llegado al mundo. Uno de los datos más importantes es el peso del pequeño, ya que esto podría indicar el estado de nutrición y el desarrollo que tiene dependiendo de la edad gestacional.
A pesar de esto, existen otros datos importantes para un especialista tales como las diferentes medidas del recién nacido; sin embargo, estas pueden variar considerablemente entre un niño y otro. Es por esto que si te preguntas ¿cuánto mide un bebé al nacer aproximadamente? Te aconsejamos que sigas leyendo el siguiente artículo de ONsalus.
Las medidas del recién nacido
Los bebés deberían llegar al mundo entre la semana 38 y la 42 de amenorrea, es decir, la ausencia de la regla que debe contarse desde el primer día de la última menstruación. Cuando el pequeño nace, puede ser algo difícil saber con exactitud cuánto mide debido a que los niños que recién salen del vientre de su madre se encuentran con los miembros flexionados por la postura fetal que tuvieron durante tanto tiempo.
Si bien las medidas de un bebé pueden ser totalmente diferentes entre cada uno, se considera que un niño que nació a término debe medir entre 47 y 52 cm. A pesar de esto, la talla puede variar por varios aspectos, por ejemplo, de las características genéticas del pequeño, es decir, si sus padres y familiares son muy altos o más bien bajos, entre otros aspectos.
Muchos padres suponen que la medida de su hijo al nacer tiene una gran relación con la altura que tendrá el mismo al crecer; sin embargo, esto no es correcto debido a que su medida de adulto no solo dependerá de su genética, sino también de la forma en que se produce su desarrollo en la niñez y la pubertad, su alimentación durante estas etapas y si realiza algún deporte, entre otras.
Cómo saber si el tamaño de un recién nacido es correcto
El médico encargado deberá ser cuidadoso cuando observe al bebé, ya que si el mismo es muy pequeño o muy grande podría ser un factor importante para su vida y desarrollo fuera del útero de la madre. Es por este motivo que luego de su nacimiento, los especialistas se encargan de controlar el peso y las medidas del niño para poder compararlos con cifras normales, es decir las medias, dependiendo de las tablas de peso y altura por percentiles.
Los encargados de revisar al bebé pueden observar en las tablas el peso y el tamaño habitual de un niño ya que, si se percibe algún factor anormal podría existir algún aspecto importante que se debe tener cuenta. Si bien no varían mucho los datos por sexo entre los bebés, se estima que un niño mide entre 46 y 53,5 cm con un peso entre 2,500 y 4,300 kg. Puede variar levemente en el caso de nacer niña, pues una niña mide entre 45,5 y 53 cm con un peso de entre 2,400 y 4,200 kg. No obstante, como podemos apreciar la diferencia entre las medias es mínima.
Si el bebé se encuentra por fuera de estos valores normales es importante que el médico lo revise correctamente, por si hubiera alguna señal de peligro en el recién nacido, pues puede tratarse de un peso que igualmente se pueda considerar normal o, por el contrario, podría deberse a algún tipo de alteración, la cual hay que identificar.
Qué sucede si un bebé recién nacido es muy grande o muy pequeño
Generalmente, los bebés que son grandes, es decir, aquellos que son considerados por encima del percentil 90, pueden hacer felices a muchos familiares porque piensan que el mismo se encuentra totalmente sano y, que ser grande, es sinónimo de buena salud; sin embargo, esto no es totalmente correcto debido a que en estos casos es importante revisar el azúcar o la glucosa en sangre porque su medida puede deberse a una dificultad para regular este componente. En caso de ser así, es posible que el especialista recomiende que el niño sea alimentado con más frecuencia que a otros bebés, ya que corre el riesgo de sufrir de hipoglucemia, una condición en la cual hay un nivel bajo de azúcar que puede afectar al crecimiento del pequeño.
En caso contrario de que el recién nacido sea muy pequeño, por debajo del percentil 10, hay que revisar la alimentación debido a que pueden presentar muchos más problemas a la hora de comer y dificultad para regular constantemente su temperatura por sí mismos, esto se debe a que su sistema de termorregulación todavía está en desarrollo.
En estos casos, si hay alguna anomalía, afección o enfermedad que tenga que controlar, el especialista neonatólogo será quién ayudará a los padres, por ser el médico especializado en recién nacidos. Además, luego de unos días que el pequeño haya nacido, tanto si hay alguna enfermedad que controlar como si no la hay, es importante llevarlo al primer control con el pediatra. El mismo se encargará de volver a medir y pesar al pequeño para informarle a los padres sobre su desarrollo y ofrecerles las instrucciones necesarias para cómo seguir criando de la mejor forma al niño.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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