Cuidados después de una operación de prótesis de rodilla
La rodilla es una de las partes del cuerpo que más expuesta está a diversas alteraciones y, de hecho, es una articulación que sufre numerosos trastornos y lesiones y, en muchas ocasiones, se requiere el uso de prótesis, lo cual puede deberse a diferentes factores, tales como la edad avanzada, sufrir de obesidad, practicar deportes considerados de alto impacto o realizar tareas a diario que pueden poner en peligro la salud de la rodilla.
Cuando se requiere de una prótesis, el paciente debe someterse a un procedimiento quirúrgico, el cual no suele conllevar grandes riesgos, sin embargo, es importante acudir a un centro médico de confianza. Si vas a someterte a esta intervención, en el siguiente artículo de ONsalus, te detallamos algunos cuidados después de una operación de prótesis de rodilla.
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Cuidados después de una operación de prótesis de rodilla
Una vez que se reciba el alta, es indispensable seguir estrictamente las instrucciones del profesional. Para el hogar, es posible que el médico recomiende tomar estrictamente la medicación que recete, ya sea analgésico o cualquier fármaco, para que el paciente se sienta más cómodo y tranquilo después del tratamiento.
El paciente no debe conducir hasta que el profesional lo indique, por lo que es importante que se intente buscar ayuda para que alguien lo traslade en el coche. Asimismo, resulta indispensable que no se conduzca bajo ninguna circunstancia si se está ingiriendo analgésicos que cuenten con contenido narcótico.
Si existe inflamación el pierna o la rodilla, lo cual suele ser bastante frecuente y normal después de haber estado en el quirófano, es aconsejable que se mantenga siempre en alto la pierna en cuestión, sin embargo, nunca se debe colocar un cojín o un objeto similar por debajo de la rodilla.
Puede ocurrir que un paciente recién operado sienta molestias en la zona durante la noche. Para estos casos, se recomienda que la persona se levante y camine un poco para activar más la circulación y, de esta forma, aliviar los dolores.
La herida va a llevar unos puntos durante aproximadamente 2 semanas, aunque depende de las consideraciones del especialista. Durante este tiempo, es necesario mantener la herida limpia y realizar las sanaciones indicadas por el médico.
Es posible que se aconseje el uso de medias compresivas para ayudar a controlar la inflamación en la zona tratada. Asimismo, es importante utilizar calzado cómodo y cerrado para evitar caídas que dañen la prótesis.
Si la persona que se somete a una operación de prótesis de rodilla sufre de sobrepeso, es conveniente bajar de peso para no dañar la prótesis y mantenerse más saludable. Al mismo tiempo, resulta indispensable acudir a un médico lo antes posible si se observan signos de infección en la herida.
Cuidar los movimientos durante el postoperatorio de prótesis de rodilla
Durante las primeras semanas, después de la operación de prótesis de rodilla, es importante que la persona cuide la prótesis, por lo que es necesario tener cuidado con movimientos que suelen ser muy habituales. Uno de los casos más comunes es el vestirse, una acción que se realiza a diario, sin embargo, después de la operación es recomendable ponerse los pantalones estando sentado, ya que hacerlo de pie requiere descargar mucho peso en una pierna, por lo que la rodilla tratada puede verse afectada.
Es posible que durante las primeras semanas después de la intervención, se utilice andadores o bastones para facilitar la movilidad y ayudar al paciente a que recupere poco a poco el equilibrio y la estabilidad.
Además de no realizar esfuerzo con la pierna tratada, es importante no excederse en el peso que se lleve, ya sea en un bolso o una mochila. Al mismo tiempo, hay que tener cuidado cuando se organiza la casa debido a que la persona no deberá agacharse ni buscar objetos en lugares altos para no provocar daños en la zona tratada.
Sumado a lo anterior, es indispensable acondicionar la casa para evitar caídas, por ejemplo, se recomienda utilizar alfombras para el baño ya que es fácil resbalarse y, por más que no se llegue a una caída, puede ser perjudicial para la pierna con cirugía.
Si bien se deben evitar las escaleras, existen ciertos casos en los que esto no puede evitarse. En estas situaciones, es importante comenzar a subir una escalera con la pierna que no ha sido sometida a cirugía, mientras que si se tiene que bajar, se debe empezar con la pierna que sí tiene la rodilla operada.
Otros consejos para la recuperación de prótesis de rodilla
La herida que queda con puntos después de la cirugía debe ser correctamente limpiada de forma diaria. Esto implica realizar un seguimiento para observar que no se hinche, se enrojezca, produzca sensibilidad excesiva o supure. Asimismo, se debe cambiar los vendajes para que la herida siempre se encuentre limpia, por lo que se tiene que evitar exponer la zona a diversas amenazas, tales como manipular la cicatriz con las manos sucias.
Al sentarse, se recomienda buscar sillas de gran altura, es decir, que la cadera quede por encima de las rodillas y, en lo posible, con apoyabrazos para hacer la fuerza con las extremidades superiores al levantarse. Mientras el paciente se encuentra sentado, es importante que alterne la postura de la rodilla, un rato estirada y otro flexionada. A pesar de esto, se aconseja no sentarse con las piernas cruzadas.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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