Dieta para mejorar la rosácea

Dieta para mejorar la rosácea

La rosácea es una afección crónica que afecta la piel causando enrojecimiento, hinchazón y lesiones cutáneas similares a las del acné. La causa de esta enfermedad se desconoce, pero existen factores que aumentan el riesgo de padecerla, tales como ser mujer, tener piel clara y estar entre los 30 y 50 años de edad. La rosácea causa inflamación de los vasos sanguíneos que están por debajo de la piel y en algunos casos se asocia con trastornos oculares.

La rosácea es una enfermedad que no tiene cura y que se manifiesta a través de brotes que pueden ser desatados por factores como la alimentación, ya que existen ciertos alimentos que pueden empeorar los síntomas de esta enfermedad. Reconocer qué comidas pueden desencadenar un brote es fundamental para vivir con esta enfermedad, por esta razón en este artículo de ONsalus te informamos cómo debe ser la dieta para mejorar la rosácea.

Dieta para mejorar la rosácea: alimentos buenos

Comer de manera saludable es cada vez más complicado con tantas dietas nuevas, por esta razón la dieta ideal es aquella que nos favorece individualmente y que está basada en alimentos que estimulan nuestra salud y mantienen controladas ciertas enfermedades de nuestro historial médico. La rosácea es una enfermedad que no actúa de la misma manera en los seres humanos, por lo que es probable que existan alimentos que afecten a una persona y a otra no, por esta razón no existe una dieta general para mejorar la rosácea.

Sin embargo, se ha comprobado que la composición nutricional de algunos alimentos está asociada con la aparición de los brotes de rosácea, razón por la cual será conveniente que cada persona afectada con esta condición vaya reconociendo cuáles de los mejores alimentos para la rosácea le favorecen en el tratamiento de esta afección y, una vez reconocidos, elabore un plan alimenticio basado en los mismos.

Alimentos buenos para la rosácea

  • Omega 3: los pescados y los alimentos ricos en omega 3 son de acción antiinflamatoria que ayuda a disminuir la hinchazón de la piel por la rosácea. Salmón caballa, nueces y germen de trigo.
  • Carnes magras: el pollo y el pescado son mucho más saludables y tienen menor cantidad de grasa, razón por la que ayudan a mantener un bajo nivel de calor corporal. El calor es otro de los factores desencadenantes de brotes de rosácea.
  • Fibra: el consumo de fibra y aceites ayuda a regenerar la piel, encuéntralos en granos enteros, arroz o pasta integral y la quinoa. La fibra es buena para la rosácea porque estimula el tránsito intestinal, permitiendo que se depuren más toxinas de la sangre, lo cual se refleja de manera positiva en la piel.
  • Bayas: cerezas, moras y arándanos ejercen en el cuerpo una acción vasoconstrictora que ayuda a reducir la inflamación de los vasos sanguíneos debajo de la piel y disminuye el enrojecimiento.
  • Verduras: en toda alimentación no pueden faltar las verduras que tantos nutrientes y vitaminas aportan. Evita los tomates, las espinacas y los aguacates.
  • Alimentos ricos en vitamina A: esta vitamina es indispensable para la salud de la piel y la puedes encontrar en la zanahoria, mango, pimiento rojo, papaya, naranja y melón. La cantidad diaria recomendada oscila entre los 700 y 1400 UI.
  • Ajo y cebolla: acompañar o condimentar tus comidas con ajo y cebolla será de gran ayuda para mantener los intestinos y la sangre libres de toxinas. Tomar un diente de ajo en ayunas todos los días es óptimo para mantener la sangre depurada y evitar que su toxicidad afecte directamente la salud de la piel.

Alimentos no recomendados para la rosácea

Existen alimentos que intervienen negativamente en algunas funciones del cuerpo y que tienen la capacidad de desatar los brotes, razón por la que resulta necesario evitar y disminuir su consumo. Conozcamos algunos de ellos:

  • Alimentos picantes o muy condimentados: por lo tanto se recomienda reducir el consumo de chile, pimienta, adobo, jengibre, mostaza, soja y otras salsas o especias.
  • Alimentos con glucosa: un consumo frecuente de pan, patatas fritas, bollería, pasteles, bizcochos y dulces aumenta el azúcar en sangre y la producción de insulina. Este proceso estimula la producción de otras sustancias y hormonas, como los andrógenos, que aceleran la producción de grasa en la piel y pueden obstruir los poros y causar los granos.
  • Bebidas calientes: el café o el chocolate calientes pueden aumentar el calor corporal y desencadenar un brote de rosácea.
  • Alcohol: se recomienda tomar con mucha precaución, ya que estimula la dilatación de los vasos sanguíneos.
  • Carnes: evita la carne de res y todo producto que pueda contener grasas trans.

Dieta para mejorar la rosácea

En vista de que los factores que desencadenan los brotes pueden ser distintos en cada persona, la dieta para mejorar la rosácea nunca será la misma para quienes padecen esta enfermedad. Sin embargo, a continuación encontrarás un menú modelo que se puede modificar según las necesidades individuales de cada quien.

  • En ayunas: masticar o pasar con agua un diente de ajo crudo. También se puede tomar un vaso de agua tibia con zumo de limón o una taza de té verde. Haz el desayuno media hora después.
  • Desayuno: escoge una fruta y come toda la cantidad que desees.
  • A media mañana: puedes comer un sándwich con verduras y vegetales o un plato de avena con leche de almendras o tostadas de pan integral con pavo.
  • Comida: pescado, pollo o cerdo a la plancha con una porción de ensalada fría. Un vaso de agua tibia.
  • Merienda: infusión de té verde o manzanilla.
  • Cena: vegetales al vapor o pasta integral con verduras.
  • Antes de dormir: una manzana para depurar la sangre mientras duermes.

Consejos para mejorar la rosácea

  • Lleva un diario de brotes donde anotes todos los factores que te han llevado a empeorar los síntomas de la enfermedad. Así tendrás tu propia guía de alimentos que debes evitar y será más fácil llevar una dieta para mejorar la rosácea.
  • El agua es el mejor desintoxicante natural que existe. Bebe al menos 2 litros diarios.
  • Lo ideal es hacer entre 6 y 5 comidas ligeras a lo largo del día para evitar tener digestiones saludables y evitar la fermentación de los alimentos que tanto afecta la piel.
  • No combines frutas con otros alimentos, incluso no mezcles unas frutas con otras. Esto te ayudará a evitar la producción de alcohol en el hígado debido a la fermentación rápida de este tipo de alimentos en el estómago.
  • Evita las altas temperaturas y usa todos los días protector solar.
  • Colocar manzanilla o aloe vera en la piel enrojecida e infamada refresca la epidermis, la desinflama y mejora su apariencia.
  • El uso de cremas o antibióticos recetados por el médico debe seguirse al pie de la letra para controlar la rosácea.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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