El aumento de uno de los testículos puede ser un importante signo de alarma en los hombres. Sin embargo, genéticamente y embriológicamente es normal que nuestros testículos no sean iguales, por lo que la mayoría de síntomas no son realmente importantes. Existen múltiples causas del aumento de uno de los testículos, como la hidrocele o el varicocele.
También el cáncer testicular es un tipo de neoplasia maligna que puede aumentar el tamaño de los testículos, no obstante, en general no es un problema de salud pública por su baja tasa de prevalencia (representa entre el 0,5% y el 1% de todos los cáncer). Por otro lado, es un cáncer que está aumentando su incidencia en nuestro medio, especialmente en adultos jóvenes. Este tipo cáncer puede llegar a ser curable al 100% si se diagnostica tempranamente y antes de que se haya diseminado. En ONsalus te contamos más acerca de la diferencia en el tamaño testicular respondiéndote a la pregunta sobre si es normal tener un testículo más grande que el otro.
Un testículo más grande que el otro, ¿es normal?
En general, es normal que exista una diferencia en el tamaño de nuestros testículos y en la forma en que cuelgan, en el proceso embriológico, los testículos son originados en la cavidad abdominal y luego van descendiendo hasta alcanzar la bolsa escrotal, por lo que es normal que exista una pequeña diferencia en la forma en la que cuelgan. No obstante, hay una enfermedad llamada criptorquidia, en la que los testículos no descienden correctamente, esta enfermedad es diagnosticada muy tempranamente, usualmente en los primeros momentos de la vida. El tamaño normal de los testículos es:
- 4 a 8 centímetros de largo, con una media de 6 centímetros.
- 2 a 4 centímetros de ancho, con una media de 3 centímetros.
Estas medidas son de referencia y no deben tomarse como un rango de normalidad, simplemente como un parámetro para tener en cuenta.
Testículo hinchado: causas
Existen muchas causas que pueden aumentar el tamaño de uno de los testículos, principalmente son:
- Hidrocele: Se refiere a la acumulación de líquido en el testículo, usualmente es inofensivo y rara vez requiere una intervención, donde lo que se busca es aspirar el líquido que se encuentra dentro. Esta condición puede tener múltiples causas.
- Torsión testicular: Ocurre cuando un testículo se rota sobre su propio eje y colapsa las estructuras que comunican este órgano con el abdomen: vasos sanguíneos, epidídimo, entre otros. Esta condición suele asociarse a fiebre y dolor intenso, que debe ser tratado inmediatamente, pues si no es así, el testículo puede morir y tendrá que ser extirpado.
- Epididimitis: Es la inflamación del epidídimo, una estructura ubicada en la parte posterior del testículo cuya función es almacenar los espermatozoides. Esta inflamación suele ser causada por infecciones virales o bacterianas. La inflamación de los testículos se llama orquitis, puede ser unilateral o bilateral. La orquitis está muy asociada a la infección por paramyxovirus, que causa la parotiditis (inflamación de la glándula parótida), o conocida popularmente como paperas.
- Varicocele: Se refiere a la dilatación de las venas ubicadas en el escroto, la piel que recubre los testículos, generalmente no causa dolor, pero puede estar muy asociado a la sensación de pesadez en la región. Usualmente no requieren tratamiento.
- Cáncer testicular: Actualmente, es la primera causa de cáncer en hombres jóvenes. En general, presenta un buen comportamiento, con una tasa de supervivencia de casi el 100% si es diagnosticado de manera oportuna. La quimioterapia suele ser suficiente para curar este tipo de neoplasia maligna.
Autoexamen de testículos
Detectar el cáncer testicular tempranamente puede ser muy fácil y solo se requiere hacer un autoexamen, que corresponde a:
- Mantener el pene apartado todo el tiempo, examinar un testículo a la vez.
- Colocar el testículo entre el pulgar y los demás dedos de la mano, comenzar a rodarlo buscando abultamientos duros, masas o cualquier inconsistencia
- En la parte posterior del testículo se encuentra un cordón llamado epidídimo, es posible sentirlo, además de los vasos sanguíneos que llegan o salen del testículo.
Cualquier anormalidad es mejor consultarla con un médico o urólogo, especialmente si ha habido un aumento repentino y rápido de uno de los testículos. Se aconseja realizarse un autoexamen mensualmente desde la adolescencia, para evitar el crecimiento de lesiones. Este artículo solo es una guía con conceptos generales y no remplaza de ninguna forma la consulta con un médico. Para más información, en el siguiente artículo te explicamos los pasos para hacerse un autoexamen testicular.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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