Falta de hierro: síntomas y causas

El organismo necesita de minerales para completar su nutrición y realizar una serie de procesos indispensables para la salud. Entre estos minerales destaca el hierro, cuya función principal es transportar el oxígeno a través de la sangre y promover la respiración celular. El hierro es muy importante para la salud porque:

• Interviene en la producción de hemoglobina.
• Ayuda a almacenar oxígeno en los músculos.
• Aumenta la resistencia del cuerpo a ciertas enfermedades.
• Actúa en la síntesis del ADN y en la producción de colágeno.

Los valores de hierro normales en sangre para los hombres son de 80 a 180 µg/dl y para las mujeres de 60 a 160 µg/dl, cualquier valor por debajo de las cifras mencionadas anteriormente se considera una señal importante de ferropenia o falta de hierro en sangre.

Mareos y náuseas

La falta de hierro en la sangre puede causar un cansancio extremo que desencadene mareos y ganas de vomitar. Por lo general, las personas con ferropenia no pueden desempeñar con energía sus actividades diarias y se encuentran siempre fatigados.

Palpitaciones anormales

La falta de hierro compromete la oxigenación correcta de la sangre y del organismo, hecho que puede causar que el corazón comience a latir de manera más rápida, generando ansiedad y falta de aliento.

Piel pálida

Este es uno de los síntomas de la falta de hierro más característicos. Cuando los niveles de hierro en la sangre bajan demasiado la piel pierde su color natural y la persona comienza a lucir mucho más pálida porque los tejidos de la misma no están recibiendo la cantidad de oxígeno suficiente. Este es uno de los síntomas más evidentes de que la persona presenta anemia ferropénica.

Falta de energía

Para las personas con fata de hierro cualquier esfuerzo es demasiado debido a la debilidad y falta de energía. Cuando la ferropenia no se corrige a tiempo el cansancio puede ser crónico y la persona puede querer estar todo el día en cama.

Humor irritable

La carencia de hierro también interviene en el estado anímico de las personas, causando irritabilidad o episodios depresivos. Es importante estar atento a este síntoma para evitar que los cambios emocionales se conviertan en un problema mayor.

Otros síntomas de la falta de hierro:

• Dolor de cabeza.
• Dificultad para respirar.
• Vértigo.
• Lengua pálida.
• Pérdida de peso inexplicable.
• Uña en forma de cuchara.
• Piel seca y áspera.
• Estreñimiento.
• Infecciones frecuentes.

El cuerpo humano puede almacenar solo una pequeña porción de todo el hierro que se pierde, por esta razón se considera que las principales causas dela falta de hierro son:

• Déficit nutricional o bajo consumo de alimentos ricos en hierro.
• Desnutrición o alimentación vegetariana.
• Hemorragias prolongadas.
• Menstruaciones abundantes y duraderas.
• El cuerpo necesita más hierro debido a un embarazo.
• Sangrado intestinal o úlcera sangrante.
• Donación frecuente de sangre.
• Afecciones gastrointestinales que inhiben la debida absorción de los alimentos.
• Trastornos hormonales.
• Consumo prolongado de algunos medicamentos como los antibióticos.
• Déficit de vitamina C o vitamina B6, ambas indispensables para la correcta absorción del hierro.
• Enfermedades reumáticas.
• Trastornos hematológicos.
• Enfermedad celíaca o enfermedad de Chron.
• Cirugía bariátrica del estómago.
• Uso constante de antiácidos.
• Cirrosis hepática.

Si te sigues preguntando por qué tengo el hierro bajo, en el siguiente artículo encontrarás algunas de las posibles causas.

Cuando una persona presenta falta de hierro por tiempo prolongado termina desarrollando anemia ferropénica, el tipo más común de anemia en la que el cuerpo no cuenta con suficientes glóbulos rojos sanos. El hierro es indispensable para la producción de glóbulos rojos, por lo tanto su déficit impide que la sangre pueda transportar correctamente el oxígeno.

Los síntomas de la anemia ferropénica son los mismos de la falta de hierro y para diagnosticar esta afección bastan con realizar una analítica y comprobar los niveles de hemoglobina, hierro y glóbulos rojos en la sangre. Una vez que la persona confirma que tiene anemia es importante realizar cambios en su alimentación para incluir alimentos ricos en hierro. También es posible que el médico recete el consumo de suplementos de hierro para estabilizar de forma más rápida los síntomas y combatir efectivamente la deficiencia, sin embargo siempre será indispensable saber por qué la persona presenta falta de hierro y atender también dicha condición.

En el caso de las mujeres embarazadas es muy común que el médico recete también el consumo de vitaminas y minerales para evitar un déficit y prevenir así la anemia ferropénica. Cuando una persona presenta fata de hierro por lo general los valores se estabilizan al cabo de dos meses en tratamiento.

Existen muchos alimentos ricos en hierro, sin embargo el hierro que proviene de vegetales y hortalizas es mucho más difícil de absorber y por lo tanto no se recomienda su ingesta para tratar la ferropenia. Los alimentos que más y mejor hierro contienen son:

• Legumbres secas (habas, arvejas, semillas de soja y habichuelas).
• Frutas deshidratadas (albaricoques, ciruelas pasas, uvas pasas).
• Carne de res.
• Cereales fortificados con hierro.
• La yema de los huevos.
• Hígado.
• Carne de aves y carne roja oscura.
• Salmón y atún.
• Granos enteros (arroz, avena, mijo, trigo).

Cuando se mezcla la carne magra, pescado o aves con verduras o legumbres, la absorción de hierro aumenta hasta tres veces. Los alimentos ricos en vitamina C, tales como la naranja, las fresas, la guayaba y el limón también ayudan a mejorar la absorción de hierro en el organismo. Asimismo, existen alimentos que pueden disminuir la asimilación de este mineral, tales como el té negro.

En el siguiente artículo de ONsalus te explicamos algunas recetas para subir el hierro.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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