Infección por pseudomonas: síntomas, causas y tratamiento

Infección por pseudomonas: síntomas, causas y tratamiento

La bacteria Pseudomonas aeruginosa puede encontrarse en el agua, la tierra, las plantas o en los animales, incluso en el humano, ya que sus necesidades alimenticias para sobrevivir son muy mínimas; sin embargo, en los seres humanos es más frecuente encontrarla en las zonas más húmedas como las axilas, los oídos y el área alrededor del ano, aunque es muy poco probable que la misma provoque trastornos en personas que se encuentran totalmente sanas o con un sistema inmunológico fuerte.

Cuando ocurren infecciones producidas por pseudomonas pueden ser externas y leves, llegando a afectar al oído o a los folículos pilosos, o podrían ser internas y graves, como las que comprometen a los pulmones, el torrente sanguíneo o las válvulas del corazón. Es decir, la gravedad varía desde un trastorno muy leve hasta alteraciones graves que pueden llegar a ser potencialmente mortales.

Si no conoces mucho sobre esta bacteria, en ONsalus te ofrecemos toda la información sobre la infección por pseudomonas: síntomas, causas y tratamiento.

Principales síntomas de infección por pseudomonas

La sintomatología de las infecciones por pseudomonas varía dependiendo del tipo de infección y el lugar de la misma.

Si se trata de una infección en el tracto respiratorio, dentro de las manifestaciones puede notarse una tos crónica, pérdida del apetito, sibilancias en el pecho cuando se respira, pérdida de peso, confusión, escalofríos y dificultad para respirar, lo que hace que el color de la piel se vea más azulado.

Si la invasión por pseudomonas se localiza en las válvulas cardíacas, los síntomas más comunes son la fiebre, la fatiga, la existencia de un soplo en el corazón, la presencia de líquido en los pulmones, mareos, debilidad, latidos del corazón irregulares o rápidos y que haya retención de líquidos en el cuerpo.

En el caso que el trastorno se encuentre en el sistema nervioso central, se percibe el desarrollo de fiebre alta, rigidez en la espalda y en el cuello, fuertes dolores de cabeza y confusión. En cambio, si la alteración está presente en los huesos y articulaciones puede sentirse inflamación y malestar en el lugar afectado, además de la fiebre y el dolor, principalmente en el cuello y la espalda.

La infección en los oídos, piel o en los ojos provoca síntomas como molestias en la zona afectada, picazón, inflamación, fiebre, supuración, una sensibilidad extrema y la presencia de parálisis de los nervios existentes en el rostro. Mientras que si el trastorno se encuentra en los ojos se puede sufrir de problemas de visión o, en cambio, la presencia de uñas con coloración verde, pus y olor si el trastorno se encuentra presente en la piel.

En el caso de que la alteración por pseudomonas sea gastrointestinal, entre los síntomas que se hacen presentes destacan la irritabilidad, vómitos, diarrea, migraña, deshidratación, fiebre, molestias abdominales y distensión estomacal.

Causas de infecciones por pseudomonas

Dentro del amplio grupo de bacterias, las especies de pseudomonas se pueden localizar en casi cualquier sitio con humedad, ya sea en un objeto inanimado o un ser vivo, como las plantas y animales, siendo normal encontrar cierta cantidad de estas en el cuerpo humano y, aunque todos los tipos de pseudomonas son potencialmente patógenas para el humano, muchos de los casos de infección son a causa de la especie Pseudomonas aeruginosa.

Es tan común que diariamente se está en contacto directo con ella. Además de las que se alojan en el cuerpo, pueden estar presentes en los alimentos o los objetos que se utilizan habitualmente. Para que se desarrolle la infección, las pseudomonas primero deben atravesar las defensas del organismo en una cantidad considerable, luego ubicarse en sitios apropiados con humedad para multiplicarse rápidamente e invadir el área; además, dependiendo de su grado de virulencia, pueden viajar a otros tejidos u órganos a través de la sangre y originar varias infecciones.

Dicha bacteria es un patógeno oportunista, es decir, se mantiene en el cuerpo esperando una oportunidad para invadirlo y ocurre cuando el sistema inmunológico se encuentra muy bajo o el estado de salud en general está deteriorado. Por este motivo, las personas con mayor predisposición a infección por pseudomonas son aquellas que están expuestas a quimioterapia, están dializados, sufren de enfermedades pulmonares o de quemaduras severas, tienen heridas o infecciones previas o los mecanismos de defensa son inferiores, como los VIH positivos y en los bebés prematuros.

Tratamiento para combatir las infecciones por pseudomonas

Para diagnosticar correctamente que la infección es por pseudomonas, es necesario realizar un exudado o tomar una muestra del tejido de la zona afectada para después ser analizado el cultivo microbiano y que la prueba dé positiva.

El tratamiento de una infección por pseudomonas dependerá del criterio del profesional, del sitio donde se encuentre localizado el problema, el grado de virulencia y el estado de salud del paciente. Generalmente, se combate a través de antibióticos o compuestos sulfamídicos, ya sea de forma tópica si la alteración es en la piel, por vía oral o intravenosa dependiendo de la gravedad y la situación de cada persona; sin embargo, son bacterias altamente resistentes y algunas de ellas pueden adquirir resistencia a ciertos medicamentos, principalmente a antibióticos.

Si la infección es grave, es difícil de tratar o se encuentra invadiendo las válvulas cardíacas, es posible que el especialista recomiende una intervención quirúrgica para reemplazar la válvula. Es por esto que resulta indispensable realizar una consulta médica con urgencia si tienes uno o más de los síntomas mencionados anteriormente.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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