Mocos en el oído: síntomas y cómo eliminarlos

Los mocos en el oído son un problema bastante frecuente, pueden padecerlo tanto los más pequeños del hogar como las personas adultas. De hecho, se sugiere que al menos una vez en la vida todos podemos padecer de este problema, aunque en la infancia muchas veces pasa desapercibido.

La acumulación de moco en uno o ambos oídos puede producir distintos síntomas, entre los que se encuentran:

• Sensación de tener un oído o ambos tapados.
• Sensación de estar "encerrado" en un frasco por el retumbe de tus propios sonidos corporales.
• Escucharte más a ti que los sonidos de tu alrededor.
• Dolor en uno o ambos oídos.
• Sensación de presión en el oído.
• Supuración de líquido, moco, pus o incluso sangre a través de los oídos.
• Fiebre.
• Malestar general.
• Pérdida del equilibrio.

En un niño o una niña, además, pueden aparecer otros síntomas como:

• Irritabilidad.
• Llanto inconsolable.
• Problemas de sueño.
• Tocarse los oídos.
• Vómitos o diarrea.
• Disminución del apetito.
• Problemas en el habla.

Para saber cómo eliminar la mucosidad de los oídos, primero, debemos comprender por qué están allí, ya que resolver la causa de esas secreciones harán que desaparezcan y no vuelvan a reaparecer más adelante.

Entre las causas por las cuales puede aparecer mocos en el oído están:

Resfriado

Sin duda, es una de las causas principales de congestión en uno o ambos oídos. Cuando la nariz está tapada, se inflama también el conducto que la conecta con el oído (llamado trompa de Eustaquio). Cuando esto sucede, el moco que produce normalmente el oído no se drena e incluso aumenta su producción, con lo cual se estanca y da origen a la gran cantidad de síntomas que hemos descrito en el apartado anterior.

Obstrucción nasal

Cuando no respiras bien, los oídos no pueden recibir el aire necesario para ventilarse, y en ese caso puede estancarse el moco.

Esto es común en casos de desviación del tabique, malformaciones, adenoides grandes, cornetes aumentados de tamaño, alergias.

Problemas en el paladar

El paladar posee unos músculos que al tragar o bostezar hacen que se abra esa conexión entre el oído y la nariz. Cuando el paladar no trabaja adecuadamente (por estar malformado, fisurado o paralizado, por ejemplo), la trompa de Eustaquio no se abre, el oído no libera el moco que fabrica y no se ventila con aire como debería hacerlo. Así, también se acumula moco en el oído medio.

Reflujo

Cuando sube ácido desde el estómago se puede incluso inflamar estructuras de la vía respiratoria, como la nariz y los oídos. En ese caso, se puede favorecer la acumulación de moco en uno o ambos oídos.

Es muy frecuente en personas que cenan muy tarde y en pequeños que toman leche antes de dormir.

Producción excesiva de mocos

Algunos hábitos favorecen la acumulación de secreciones en el organismo y, sobre todo, en la vía respiratoria. Esto suele acompañarse de una mala digestión, la cual es clave revisar para mejorar todo el cuadro.

Pueden aumentar la producción de moco:

• Comer de más.
• Comer una excesiva cantidad de alimentos grasosos, pesados, con harinas refinadas.
• Consumir lácteos en exceso.
• Sedentarismo o falta de movimiento y ejercicio.
• Consumir comida procesada.
• Alimentarse con comida recalentada.
• Exceso de azúcar y harinas en la dieta.

Lo fundamental para destapar un oído de mocos es resolver la razón por la cual se acumulan y se producen estos en exceso.

Una o un especialista médico revisará no solo tus oídos, sino todo tu aparato respiratorio en busca de las posibles causas asociadas a la acumulación de mucosidad en el oído:

• Si existe una obstrucción, esta debería ser tratada. A veces, para ello, se indica un spray con corticoides, otras veces, un antialérgico y, en otros casos, puede ser necesaria una corrección con cirugía del tabique o de las adenoides.
• Si hay un problema en el paladar, se debe evaluar con detenimiento y buscar la mejor solución. Esta puede encontrarse a través de la rehabilitación con fonoaudiología o mediante una cirugía.
• Si hay reflujo desde el estómago, se deben resolver las causas y por el momento usar una medicación como el pantoprazol, por ejemplo. Debes tener en cuenta que lo que sueles hacer a la hora de comer, dormir y manejar tus emociones son clave.

No obstante, lo más importante y fundamental es que sea cual sea la causa, revises tus hábitos, ya que aunque quites el líquido del oído, si no resuelves la causa es probable que vuelva a aparecer este desequilibrio, de esta o de otra manera.

Qué tomar para eliminar los mocos en el oído

Si solo hay moco en el oído y se han descartado otras causas que lo generen, estas secreciones se irán poco a poco, siempre y cuando la nariz esté libre y respires bien.

Para ayudar a que la eliminación del moco sea más rápida, una o un profesional médico puede indicarte algunas de las siguientes medicaciones:

• Spray con corticoides nasal: además de desinflamar la nariz, desinflama el conducto entre ella y el oído, favoreciendo la salida de moco.
• Corticoides: se deben usar con precaución, la menor dosis posible y por el menor tiempo que se pueda. También ayudan a desinflamar las estructuras cercanas al oído y el oído en sí mismo para facilitar la salida de moco y que ya no se produzca.
• Antialérgicos: cuando la causa es una hiperreactividad de tus tejidos, puede indicarse algún antialérgico para disminuir la producción de moco y otros síntomas como estornudos o mocos tipo agua por la nariz.

Te aconsejo que no tomes esta medicación sin revisión médica, ya que aunque sean usados con frecuencia, pueden tener graves efectos adversos, sobre todo . cuando no los necesitas o los tomas de manera inadecuada.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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