La ERGE, enfermedad por reflujo gastroesofágico, es una patología que provoca que los alimentos vuelvan al esófago una vez ya han pasado al estómago y que, en sus casos más severos, puede requerir tratamiento quirúrgico.
La causa del reflujo gástrico suele ser un problema en los músculos del esófago, que no cierran correctamente, causando síntomas como la acidez, ardor y dificultado para tragar y digerir ciertos alimentos, una sintomatología que se incrementa si la persona padece de hernia de hiato.
Si padeces de esta afección y vas a tener que pasar por el quirófano en el siguiente artículo de ONsalus te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre la operación de hernia de hiato: en qué consiste y recuperación.
Cómo es la operación de hernia de hiato
La operación con la que se solventan la mayoría de los casos graves de reflujo gastroesofágico es la fundoaplicatura, pero ¿en qué consiste esta intervención?
El primer objetivo pasa por reparar la hernia de hiato, algo que se hace templando por medio de suturas la apertura del diafragma, de forma que el estómago no pueda expulsar los alimentos hacia arriba mediante esa apertura. En según que casos se puede colocar una malla para asegurarse de que no protuya hacia arriba.
Posteriormente, se envuelve con suturas la zona superior del estómago con el extremo del esófago, asegurando que ni los alimentos ni los ácidos gástricos podrán devolverse al esófago una vez estén en el estómago.
Dada la naturaleza de la intervención, todo esto se hace bajo anestesia general, por lo que el paciente está dormido y sin sentir ningún tipo de dolor durante el tiempo que dure la operación. Normalmente, se tarda entre 2 y 3 horas, aunque ocasionalmente puede durar más o menos dependiendo de la técnica que use.
La fundoaplicatura se puede hacer de distintas formas, con distintas técnicas, dependiendo de la particularidad de cada caso. A continuación te las explicamos:
Cirugía abierta
- Se trata del sistema tradicional, mediante una abertura en el abdomen del paciente.
- Se introduce una sonda en el estómago a través del abdomen de modo que la pared estomacal se quede en su sitio.
- Al cabo de una semana se retira la sonda.
Reparación laparoscópica
- En vez de una gran apertura, se hacen entre 3 y 5 pequeñas incisiones en el abdomen.
- En una estas aperturas se introduce una pequeña cámara, un laparoscopio, por donde se observará la operación.
- En las otras se introducirán las herramientas quirúrgicas con las que se trabajará.
- La operación se realiza observando la imagen captado por el laparoscopio en un monitor.
- En caso de que se presente algún problema durante la operación se puede proceder a hacer una cirugía abierta.
Fundoaplicatura endoluminal
- Este procedimiento es relativamente nuevo y va ganando terreno gracias a que es una técnica con la que no se hace ningún corte.
- Se pasa una cámara, un endoscopio, a través de la boca hacia el esófago.
- Con otra herramienta, el cirujano grapará la zona entre el esófago y el estómago para que quede sellada y ni ácidos ni alimentos puedan subir hacia arriba.
Cuándo se debe hacer la operación de hernia de hiato
La operación de hernia de hiato es la última fase en el tratamiento de esta condición, antes de llegar a este punto se puede probar con otros tratamientos menos invasivos, por lo que solo cuando estos no funcionen será recomendable pasar por el quirófano. A continuación te explicamos las posibilidades que debes contemplar antes de practicarte una operación por ERGE:
- Medicamentos como los inhibidores de la bomba de protones.
- Cambios en el estilo de vida y en la alimentación.
Debe practicarse una operación de hernia de hiato cuando:
- No respondes al tratamiento médico.
- Los fármacos te producen otros efectos secundarios.
- Tiene otros problemas de esófago como sangrado, úlceras o estrechamiento.
- Le está causando neumonía por aspiración, ronquera o tos crónica.
Recuperación tras operación hernia de hiato
La cirugía para la hernia de hiato, especialmente en el caso de la laparoscópica, tiene unos plazos de recuperación bastante rápidos. El periodo de hospitalización va desde 1 a 3 días tras la operación, aunque en los casos de cirugía abierta esta se puede alargar hasta los 6 días.
Hay que ser consciente que tener el alta hospitalaria no significa poder reincorporarse a las actividades cotidianas, para poder volver con normalidad al día a día deben pasar, dependiendo del paciente, entre 3 y 6 semanas.
Durante este tiempo, hay una serie de cuidados que deberás llevar a cabo para que el proceso de cicatrización se de con normalidad y no surja ningún problema. Estos cuidados se centran en dos puntos clave: la dieta líquida y el cuidado de la herida.
Cómo debe ser la dieta tras la operación
- Durante las 2 primeras semanas la dieta debe ser totalmente líquida y las 2 siguientes una dieta semi-líquida con alimentos suaves.
- Al principio las cantidades serán pequeñas, de una taza cada ocasión, haciendo pequeños sorbos y sin engullir.
- No debes beber líquidos muy fríos.
- No debes beber bebidas y refrescos carbonatados.
- No debes beber mediante pajillas, pues de este modo puede entrar aire al estómago.
- Las pastillas y otros medicamentos debes triturarlos y tomarlos con agua durante el mes posterior a la operación.
- Cuando reintroduzcas los alimentos sólidos, hazlo en pequeñas cantidades, masticando correctamente.
- No comas productos fríos.
- No comas alimentos que tienden a aglutinarse, como por ejemplo el pan o el arroz.
Cómo debe cuidarse la herida
- Si han usado puntos de sutura, al día siguiente d ela operación debes retirar la gasa y lavar convenientemente la zona. Deberás repetir esta operación con regularidad.
- Si usaron tiras de cinta para cerrar la piel, cúbrelas con plástico antes de ducharte para evitar que entre agua o se mojen. No intentes quitarte las cintas, estas caerán por si solas cuando cicatrice la herida.
- No nades, te bañes en la bañera o en un jacuzzi hasta que el médico te lo indique.
Otros consejos durante la recuperación
- Para aliviar los gases que se pueden producir es recomendable andar un poco.
- Durante el tiempo que estés tomando analgésicos no lleves maquinaria ni conduzcas.
- Mientras tomes los analgésicos no puedes beber ningún tipo de alcohol.
- Come en pequeñas cantidades a lo largo de todo el día.
- No levantes nada que pese más de 4 kilos, no empujes ni hagas esfuerzos.
- Ves aumentando tu actividad poco a poco, midiendo tus sensaciones y dolor.
Los ardores, la acidez y todos los síntomas que sentías antes deben desaparecer o, al menos, mejorar tras la operación de la hernia de hiato. No obstante, en algunos pacientes será necesario seguri tomando medicación contra el reflujo e incluso someterse a una segunda operación.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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