Picazón en las axilas: causas y remedios caseros

La picazón en las axilas es un síntoma muy frecuente que puede tener diferentes causas, algunas fáciles de tratar y otras que requerirán atención médica. En todo caso, es importante estar atentos a este síntoma, ya que además de ser muy molesto puede ser el inicio de una infección, que si no se trata rápidamente puede empeorar e incluso requerir antibióticos.

Las axilas son una zona del cuerpo que se encuentra expuesta a ciertos agentes irritantes, pero además es una área que acumula sudor, es decir, humedad y calor, lo que las convierte en un espacio idóneo para que se desarrollen agentes patógenos. Es por esto que el picor en las axilas puede deberse a diferentes razones. Entre ellas, se encuentran las siguientes:

• Higiene inadecuada: en esta zona pueden desarrollarse bacterias que, además de mal olor en las axilas, pueden producir picazón.
• Productos de higiene personal: jabones, perfumes, cremas hidratantes, desodorantes o antitranspirantes pueden producir alergias. El principal factor generador de alergias en las axilas es el desodorante, así que es importante descartar si este es tu caso observando cuándo aparece la irritación o en qué momento empeora.
• Prendas de vestir: las telas u otros materiales sintéticos que entran en contacto con la piel pueden producir irritación en las axilas. En estos casos, si asocias la picazón con el uso de ciertas prendas, deja de usarlas y prueba utilizando otras de algodón. Este es un material que no produce alergias, pero que actualmente se utiliza poco.
• Axilas irritadas por depilación: eliminar el vello de las axilas puede resultar muy irritante para la piel, ya sea al rasurarlo o depilarlo. Además, esto puede hacer que los vellos al crecer nuevamente se encarnen, lo cual produce no solo picor, sino dolor y hasta puede llegar a infectarse y convertirse en un grano con pus.
• Picor en axilas por hongos: el área de las axilas puede mantener mucha humedad por ser una parte del cuerpo que concentra glándulas sudoríparas. Este ambiente húmedo y tibio puede favorecer la aparición de hongos, como ocurre en otras partes del cuerpo. Esto, sin duda, provocará irritación y picazón.
• Enfermedades graves: el picor en las axilas puede ser un síntoma de enfermedades más graves como la insuficiencia renal crónica, la varicela, la psoriasis, la sarna, la obstrucción de los conductos biliares y la enfermedad de Hodgkin.
• Otras causas: la piel seca, el uso de ciertos fármacos, las glándulas mamarias que se activan durante el embarazo, el frío o el calor extremos y el estrés también pueden provocar picazón en las axilas.

La picazón en las axilas puede tratarse en casa si la condición no es grave, sino será mejor acudir al médico. En el caso de que hayas podido determinar qué le está causando este síntoma y el origen no sea una afección que requiera de un tratamiento con fármacos específico, puedes decidir implementar algunos remedios caseros como los siguientes:

Lavados con bicarbonato

Lavar las axilas con una solución de bicarbonato de sodio en una proporción de una parte de agua por tres de bicarbonato.

Avena

Diferentes hierbas y productos naturales pueden servir para hacer cataplasmas o emplastes. Entre ellos, la avena puede preparase en una proporción de dos porciones de avena por una de agua y colocarse en la zona durante unos minutos. Este cereal hidrata y nutre la piel al tiempo que ayuda a regular su pH.

Compresas frías o tibias

Para aliviar la picazón en las axilas, se pueden aplicar compresas, en algunos casos frías para refrescar el área y reducir la inflamación. En otros casos, se usan compresas tibias buscando dilatar los poros para facilitar la extracción del vello encarnado.

También se recomienda el uso de compresas hechas con hierbas antiinflamatorias, como la manzanilla, la alfalfa, el romero, la menta o la albahaca, aplicadas frías.

Ungüentos y aceites

En algunos casos, hidratar la piel de las axilas aliviará la picazón. Se recomienda el uso de aceites naturales como el aceite de ricino, la manteca de karité y el aceite de almendras. También se puede usar alguna crema enriquecida con vitamina E, sábila o miel, esta última además de humectar la piel, también posee propiedades antiinflamatorias.

Si sufres con frecuencia de picazón en las axilas, quizás sea recomendable incorporar algunos hábitos sencillos en tu día a día que te ayuden a evitar este malestar, como por ejemplo los siguientes:

• Higiene y cuido del área: es recomendable mantener las axilas limpias usando productos naturales que irriten lo menos posible la zona. Por ejemplo, se puede utilizar, después del jabón, una mascarilla de yogur natural, cuyo contenido en probióticos ayuda a mantener el pH de la piel y, así, controlar la presencia de microorganismos infecciosos. También se puede hacer lo mismo con leche fría, ya que su contenido en ácido láctico también equilibra el pH de la piel.
• Mantener fresca la piel: esto puedes lograrlo utilizando vestimenta fresca de algodón y evitando los ambientes muy cálidos y húmedos para minimizar así la transpiración. También es recomendable usar ventiladores o aires acondicionados cuando hace mucho calor. Se recomienda, además, no realizar rutinas de ejercicio muy intensas cuando las temperaturas son altas.
• Evitar irritar las axilas: lo primero es identificar cuáles son los factores irritantes y los que producen alergias para entonces minimizar su uso. Sobre todo, es recomendable no rascarse bajo ninguna circunstancia para no sensibilizar el área.
• Consumir vitamina C: se recomienda aumentar el consumo de vitamina C por su efecto nutritivo y restaurador de la piel.

La picazón en las axilas, aunque puede deberse a causas benignas y fáciles de tratar con remedios caseros, puede también, en algunos casos, ameritar consultar al médico. Entre estas condiciones más graves, se encuentran:

• Dermatitis axilar: es una reacción alérgica fuerte y dolorosa que se debe al contacto con ciertos alérgenos.
• Psoriasis: se trata de una condición autoinmune que puede afectar a toda la piel del individuo, produciendo placas rojas que producen picazón.
• Foliculitis axilar: ocurre cuando un vello encarnado se infecta al punto de requerir antibióticos y otras intervenciones médicas.
• Hiperhidrosis axilar: es una condición que afecta a las glándulas sudoríparas, las cuales producen una sudoración excesiva.
• Candidiasis: la picazón se debe a una infección por hongos, por lo que el médico deberá indicar un tratamiento con antimicóticos.

Ante una picazón intensa de las axilas, que además es recurrente o prolongada, sin duda será necesario acudir al médico para que descarte alguna de estas condiciones y recete el tratamiento más adecuado.

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