Por qué me arde el ano después de tener relaciones

Hay que recordar que el ano cuenta con músculos específicos poco flexibles que mantienen cerrado este orificio y que son los encargados de controlar la expulsión de la materia fecal, a diferencia de la vagina cuyas paredes son más elásticas y tiene unas glándulas para su lubricación natural durante la excitación, lo que favorece su dilatación y que la penetración sea menos dolorosa.

Por lo tanto, si los músculos del ano no se encuentran dilatados o no se aplica lubricación en el área, se corre el riesgo de sentir mucho dolor durante las relaciones sexuales anales y, posteriormente, al despejar el ano, que quede una sensación de irritación y picor. Esto puede deberse a que se produjo algún desgarro muscular o lesiones superficiales en el tejido que rodea a dicho orificio y es la respuesta más frecuente a la duda de por qué arde el ano después de tener relaciones.

A pesar de esto, dichas molestias suelen desaparecer en no más de un par de días, pero si la irritación en el ano no disminuye o vuelve a presentarse días después de haber tenido relaciones, podría tratarse de una infección. Considerando que en dicho orificio pueden encontrarse diversas bacterias propias del cuerpo o que la pareja tenga alguna enfermedad de transmisión sexual, el que haya fisuras en el tejido por la penetración anal, le proporciona una entrada al organismo y que se multipliquen dentro de él, siendo esta otra causa de irritación en el ano después de tener sexo.

En cambio, si no hubo penetración anal y aun así se siente ardor en el ano después de tener relaciones sexuales, es posible que se trate de un síntoma de haber adquirido una enfermedad de transmisión sexual que no se contagie exclusivamente por la penetración, como el herpes. Estas enfermedades se pueden transmitir por el contacto directo de las llagas o fluidos con la piel de la persona infectada, ocurre cuando la pareja infectada hace sexo oral o frota sus partes intimas con los genitales, incluyendo el ano, de la otra persona.

Para evitar las sensaciones molestas cuando se tiene sexo anal, especialmente, la irritación, el dolor y el ardor, y lograr que el acto sea más satisfactorio durante y después del mismo, se recomienda seguir algunas medidas de cuidado, entre ellas:

• Estar excitados y relajados será un factor importante para que los músculos del ano no se encuentren rígidos y el conducto esté estrecho, ya que esto podría impedir realizar el acto sexual por el dolor.
• Estimular los músculos del ano a través de la masturbación, esto facilitará la ampliación de la abertura anal y, por lo tanto, una penetración menos forzosa.
• Aplicar lubricante íntimo en el ano y el pene o el juguete sexual a introducir para reducir la fricción en el acto sexual. Se recomienda consultar a un especialista para elegir el mejor producto en base a tus necesidades, ya que algunos podrían dañar el preservativo o causarte molestias gastrointestinales.
• Usar siempre preservativo. Aunque no existe el riesgo de quedar embarazada, la probabilidad de adquirir una enfermedad sí es muy alta para cualquiera de las personas implicadas, además es también una medida de higiene por la posible presencia de restos fecales. Si lo que se introduce es un objeto o el dedo, igualmente se les debe colocar el condón.
• Mantener una higiene adecuada. Ya sea que practiques sexo anal u oral, es necesario limpiar correctamente la zona del ano para prevenir el contagio de enfermedades o el contacto con materia fecal. Para ello, antes del acto sexual, puedes recurrir a los enemas anales o lavar el área con agua tibia y jabón intimo. Asimismo, después de la penetración anal, se debe limpiar con agua y jabón el pene, el dedo o juguete introducido antes de pasar al sexo vaginal u oral para evitar infecciones.
• Pasar al baño a defecar con anticipación al acto sexual, esto para evitar que al introducir el pene o juguete erótico entre en contacto con las heces fecales y haga incómodo el encuentro.

Por otra parte, si se tienen relaciones pero no se practica sexo anal, igualmente, es importante considerar algunas medidas de seguridad para evitar el contagio de enfermedades y disfrutar plenamente de la sexualidad, como el uso de preservativo adaptado para la lengua o una barrera bucal. Y, si se hizo sexo oral en el ano, es aconsejable limpiar bien la boca antes de estimular de esta manera los genitales o de besar a la pareja.

En general, esta irritación en la zona anal después del sexo no llega a ser tan intensa y en muchos casos disminuye y desaparece en un par de días, por lo que numerosas personas no recurren a un tratamiento especial más que cuidados básicos en el momento de defecar, que es cuando más molestias puede generar, como elegir un papel sanitario sin aroma y que no sea áspero.

Sin embargo, para ayudar a aliviar este ardor, se puede lavar suavemente el área afectada con agua tibia, principalmente después de evacuar, de hacer ejercicio o tras haber sudado mucho, y secar la zona anal con una toalla de algodón sin presionar o restregar. Es importante que si se usa jabón, este sea específico para la zona íntima, ya que los jabones perfumados o los desodorantes pueden empeorar el síntoma.

Asimismo, utiliza ropa que no sea muy ajustada y ropa interior de algodón. También la alimentación es un factor de cuidado, ya que se deben evitar aquellos alimentos que puedan irritar el tejido del ano e incrementar el ardor al ser desechados como la comida picante o muy condimentada, siendo mejor incluir alimentos ricos en fibra y estar bien hidratado para una fácil defecación.

Para una mejor recuperación, sobre todo, si el ardor en el ano es por lesiones durante la penetración anal, se debe acudir al médico para que recete el tratamiento farmacológico indicado, como el uso de cremas analgésicas y antiinflamatorias para la zona íntima.

La irritación en el ano es una sensación muy molesta, pero si esta se presenta después de haber tenido penetración o estimulación anal puede ser una condición común, especialmente, si es la primera vez o no se tomaron los cuidados necesarios. A esta sensación, le pueden acompañar otros síntomas que son considerados normales después del sexo anal, como el estreñimiento y una mayor producción de gases. Sin embargo, si estos aumentan, se prolongan o se manifiestan los siguientes síntomas, es necesario acudir de inmediato a consulta médica debido a que podría tratarse de una enfermedad:

• Dolor intenso en el ano.
• Sangrado en el área anal o las heces salen con sangre.
• Secreción blanquecina y de mal olor del ano.
• Brotan llagas, sarpullido o verrugas en la zona anal.
• Dolor o dificultad para orinar.
• Diarrea.
• La pareja sexual presenta molestias también.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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