Por qué tengo dolor de garganta sin fiebre

El organismo está frecuentemente expuesto al ingreso de agentes infecciosos por medio de la respiración, afectando principalmente la garganta. En estos casos es fácil identificar entre los síntomas de una infección viral:

• Dolor en la zona
• Inflamación de los ganglios linfáticos
• Molestias al tragar
• Flujo nasal
• Tos
• Dolor de cabeza
• Dolor corporal

Aunque comúnmente las infecciones están acompañadas por un aumento en la temperatura del cuerpo, puede no estar presente este síntoma, como ocurre en algunas infecciones virales o infecciones leves. Por ello, si te preguntas por qué tengo dolor de garganta sin fiebre, esta podría ser una respuesta.

Si se trata de una infección por virus, esta suele desaparecer por sí misma en unos 10 días, tomando algunos cuidados para no agravar la sintomatología. Sin embargo, lo recomendable es que acudas con el médico para que haga el correcto diagnostico y te recete los fármacos para disminuir los síntomas, sobre todo si estos te ocasionan muchas molestias. Probablemente incluya antiinflamatorios, analgésicos y anestésicos en enjuague o pastillas.

El aire puede contener partículas químicas que al entrar en las vías respiratorias causan irritación en las mismas, sobre todo en la faringe produciendo dolor si se está mucho tiempo expuesto. Para que esto ocurra no es necesario que trabajes en un lugar donde se emplean sustancias volátiles, solo la contaminación del lugar donde se vive por la quema de combustible fósil y el humo de tabaco generan resequedad y dolor de garganta.

En estas situaciones las molestias suelen desaparecer en poco tiempo sin necesidad de utilizar algún medicamento, pero para ayudar a aliviar las molestias lo mejor es mantenerte bien hidratado y evitar las áreas para fumadores y zonas muy contaminadas o en todo caso utiliza una mascarilla o cubreboca.

Sufrir de una reacción alérgica por las vías aéreas igual puede provocar que tengas dolor de garganta sin fiebre. Cuando una sustancia a la que tu cuerpo es alérgico logra entrar en el organismo, el sistema inmune responde liberando componentes de protección, desencadenando procesos inflamatorios principalmente en los senos nasales y la garganta, aunque también es posible en los pulmones. El dolor en la garganta por alergia también puede ser a causa del llamado goteo post-nasal, que es cuando el exceso de moco baja desde la parte posterior de la nariz y se acumula en la garganta, favoreciendo la irritación e inflamación de la misma.

Otros síntomas que acompañan la alergia respiratoria son:

• Congestión nasal
• Obstrucción de las fosas nasales
• Estornudos
• Tos
• Dolor al tragar

Se diferencia de otras afecciones porque no hay episodios de fiebre ni dolor corporal y su duración es variable. Si sufres de esto, es importante que asistas con el especialista lo más pronto posible, ya que es muy fácil que haya complicaciones si no se atiende. Además, el tratamiento y prevención dependerá de la sustancia que desencadena la alergia.

Otra de las razones de por qué tienes dolor de garganta sin fiebre, es que padezcas la enfermedad por reflujo gastroesofágico, también conocido como ERGE. Se le conoce con este nombre a la condición en la que el contenido estomacal no es retenido en el estomago por el esfínter esofágico interior, que actúa como un tapón, provocando que los fluidos escapen hacia el esófago e incluso alcancen la boca. Sufrir de acidez estomacal es algo muy común entre la población, pero cuando ocurre más de 2 veces por semana ya es un problema.

Si bien esta enfermedad se caracteriza por el ardor en el esófago, sensación de que el alimento no baja al estomago y dolor en el pecho, también puede producir dolor de garganta por la acidez de los jugos, además de otros síntomas como tos, ronquera, regurgitar los alimentos y un sabor amargo o ácido en la boca. El médico puede indicarte un cambio en tu estilo de vida y en los hábitos alimenticios si sufres de esta enfermedad, recetarte algún antiácido u otros fármacos que ayuden a disminuir la cantidad de ácido estomacal que se produce.

El desarrollo de un tumor en la faringe es una causa de dolor en la garganta, aunque también se ve afectada por otros tumores en la zona, como en la laringe o en la lengua. Percibir que se trata de un tumor a veces es complicado en sus inicios, ya que los síntomas pueden ser muy comunes con otras afecciones benignas:

• Tos
• Cambios en la voz
• Dificultad para tragar
• Ronquera
• Dolor en el cuello o el oído
• Respiración ruidosa

No obstante, es importante que visites un médico si, además de esta sintomatología, sufres alguno de estos otros síntomas:

• Dolores de garganta por más de 10 días
• Inflamación o una protuberancia en la garganta
• Saliva o flema va acompañada de sangre, es importante que consultes a un médico.

Estos tumores tienen mayor incidencia en personas de más de 50 años de edad, afectando principalmente a hombres. La remoción del tumor es necesaria para evitar que se expanda a otras áreas, pero si este ya ha avanzado el especialista puede optar por recomendar una combinación de radioterapia y quimioterapia.

Si te has preguntado a ti mismo por qué tengo dolor de garganta sin fiebre, debes saber que existen varios motivos por los que se produce esta dolencia sin que haya un aumento en la temperatura corporal y generalmente son situaciones muy comunes que no representan algo serio, por lo que siguiendo unos cuidados básicos se pueden aliviar rápidamente.

• El consumo de alimentos que contienen picante y las bebidas alcohólicas pueden irritar la faringe y causarte molestias.
• Asimismo, el tabaco es un irritante de la garganta, que además reduce la producción de la saliva, favoreciendo la resequedad en este conducto, y estimula la producción de los jugos gástricos causando reflujo.
• Por otra parte, forzar las cuerdas vocales al intentar hablar más fuerte o gritar por un largo tiempo sin tomar líquidos o un descanso puede afectar a la garganta con dolor y ronquera.
• Estos síntomas surgen igualmente cuando se respira por la boca, generalmente por la obstrucción de las fosas nasales, y cuando la humedad del aire es poca, provocando resequedad y molestias en la garganta, sobre todo por las mañanas al despertar.

Si ya estás sufriendo de dolores de garganta puedes recurrir a algunos cuidados en casa que te ayudaran a reducir este síntoma. Sin embargo, si las molestias son muy fuertes es necesario que preguntes a un médico por un tratamiento eficaz y rápido.

• Haz gárgaras con una mezcla de sal y agua tibia.
• Toma abundante agua durante el día para evitar la resequedad de garganta.
• Bebe una mezcla de miel con limón, sus propiedades favorecen mayor alivio.
• Ingiere comidas liquidas, como caldos y sopas.
• Come 2 o 3 horas antes de acostarte.
• Evita fumar o ingerir bebidas alcohólicas, impedirá que el dolor sea mayor.
• En el siguiente artículo encontrarás más trucos para curar la garganta irritada.
• También puedes descubrir los mejores remedios caseros para la garganta irritada.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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