Por qué tengo mucha sed y la boca seca

El consumo de sal desmedido en las comidas activa la sensación de tener la boca seca y la necesidad de tomar agua a cada instante. El exceso de sal altera el equilibrio hidromineral del organismo, una condición indispensable para el buen funcionamiento de ciertos procesos hormonales.

¿Qué hacer?

Lo recomendable es seguir una dieta alimenticia baja en sodio, utilizar aderezos naturales y consumir líquidos claros, además de bebe abundante agua.

Usualmente, la deshidratación se presenta por una pérdida significativa de líquido corporal, una deficiencia notoria de minerales y electrolitos, en consecuencia de los vómitos y la diarrea. En estos casos, la sensación de sed es descontrolada y, en ocasiones, si la deshidratación es prolongada, la boca puede sentirse seca, con poca saliva.

¿Cómo tratarlo?

La deshidratación casi siempre se trata ingiriendo abundante agua y soluciones orales de rehidratación. En algunos casos, cuando la situación es delicada, es necesario el uso de fármacos antidiarreicos y antieméticos para detener los malestares de diarrea y vómito.

La sed excesiva sin razón aparente, acompañada de otros síntomas como sequedad de boca y ganas de orinar de manera continua, pueden estar relacionada a una posible enfermedad metabólica, como la diabetes.

El descontrol de azúcar en la sangre conlleva a los riñones a incrementar sus funciones para tratar de contrarrestar el exceso de glucosa en el organismo. No obstante, el azúcar comienza a evidenciarse en la orina, generando mayor pérdida de agua, por lo que la persona comienza a sentir sed constante y manifestar la boca seca y pastosa.

¿Cómo tratarlo?

El tratamiento para controlar esta enfermedad se centra en fármacos precisos para nivelar los valores de azúcar en sangre, además de una dieta específica y ejercicios regulares, siempre indicados por el médico especialista.

El consumo de algunos medicamentos de manera regular puede ocasionar una deficiente producción de saliva y producir sequedad de boca y mucha sed. Los adultos mayores, con frecuencia, suelen padecer de este síntoma debido a que mantienen una ingesta de medicamentos constantes para aliviar y controlar ciertas dolencias.

Distintos estudios científicos señalan que los fármacos más comunes que generan este malestar son aquellos relacionados con la tensión arterial, los antiinflamatorios, los antidepresivos, los anticonvulsivos, entre otros.

¿Qué hacer?

En estos casos, es fundamental comunicar con detalle al especialista la presencia de este síntoma, tratar de indicar con qué intensidad ocurre y, si es posible, detectar cuál es el medicamento que lo ocasiona para que el médico lo sustituya por otro.

Por otra parte, es importante ingerir abundante agua e infusiones durante todo el día que no estén calientes o muy frías y eliminar o evitar el consumo de café.

Los tratamientos oncológicos, como las quimioterapias y las radiaciones, son bien complejos, pues, contemplan una cantidad de químicos especiales que, a pesar de ayudar a combatir el cáncer, pueden generar efectos adversos, entre ellos, la xerostomía y la polidipsia.

Un estudio teórico^[1] indica que este tipo de enfermedades suelen ocasionar daños orgánicos irreversibles, como la destrucción del parénquima glandular a consecuencia de las terapias oncológicas, específicamente para el cáncer diagnosticado en la cabeza o regiones afines.

¿Cómo tratarlo?

En estas situaciones, la historia clínica es primordial para precisar lo que se debe hacer. Para aliviar los síntomas de sequedad en la boca y la sed excesiva de pacientes con cáncer nasofaríngeo, estudios han demostrado que los tratamientos con IMRT (irradiación de intensidad modulada) son de gran ayuda.

Por otra parte, existen tratamientos a base de sustitutivos salivales para sobrellevar estos malestares, en forma de gel, spray, líquidos, pastas o pastillas. Para pacientes oncológicos, no todos los medicamentos salivales artifíciales son recomendables, en estos casos, es indispensable la evaluación previa del especialista.

Ciertas enfermedades como la diabetes, el hipotiroidismo, la sarcoidosis y el VIH tienden a generar resequedad en la boca y sed excesiva. En estas situaciones, la producción de saliva es deficiente, ocasionando dificultad para masticar y degustar los alimentos. Cada una de estas enfermedades, manifiesta además otros síntomas, como el cansancio, mareos e inflamaciones.

¿Cómo tratarlo?

En estas situaciones, es indispensable la evaluación médica para precisar con detalle el caso clínico y poder indicar el tratamiento adecuado.

Finalmente, es importante tomar en cuenta que padecer de boca seca y sed excesiva de manera persistente es una señal de alarma que hay que prestar atención, ya que existe la posibilidad de estar en presencia de una enfermedad seria. Por ello, la visita médica temprana es muy importante para obtener un diagnóstico preciso que permita establecer el tratamiento correcto para eliminar o minimizar estas dolencias en el menor tiempo posible.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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