Si bien los sangrados nasales pueden ser frecuentes en ciertas personas y no representan mayores riesgos, muchas mujeres se sienten preocupadas cuando aparece hemorragia de la nariz de forma constante durante el embarazo. Esto se debe a que es poco frecuente el conocimiento de que este trastorno es una de las molestias de la gestación de un niño debido a que no suele ser muy común, sin embargo, se trata de una de las varias alteraciones provocadas por los cambios hormonales que puede experimentar la futura madre a lo largo del embarazo.
Al tratarse de un trastorno poco frecuente del cuál no existe demasiada información en comparación con otros síntomas como los pies hinchados, es posible que tanto la mujer como el hombre se asusten de esta característica. Si te encuentras en esta situación es indispensable que consultes con un especialista, sin embargo, en el siguiente artículo de ONsalus encontrarás abundante información sobre el sangrado de nariz en el embarazo: causas.
Sangrado nasal durante el embarazo: causas
Uno de los cambios que provoca la gestación en la mujer es la expansión de los vasos sanguíneos, principalmente aquellos ubicados en la nariz. Asimismo, otro de los cambios más frecuentes del embarazo es el aumento del riego sanguíneo provocado por las hormonas, por lo que existe más presión en los vasos y, al encontrarse mucho más delicados, provoca una lesión común y sin gravedad.
Es por lo anterior que las hemorragias nasales se dan entre el 20% de las mujeres que se encuentran esperando un hijo. A pesar de sentir temores por los sangrados de la nariz que se pueden presentar de forma habitual en cualquier momento del día, generalmente, no hay ningún riesgo ni para la madre ni el bebé, sin embargo, es indispensable realizar una consulta con el especialista.
A pesar de lo detallado, existen ciertas mujeres que no han sufrido ningún tipo de alteración de este tipo pero comienzan a tener hemorragias sin ninguna explicación ni motivo aparente. Esto puede suceder por distintas afecciones:
- Si está resfriado.
- Tiene sinusitis.
- Tiene alergias.
- Tiene irritaciones en la membrana de la nariz por resequedad
Todos ellos son factores que aumentan considerablemente el riesgo de sufrir sangrados nasales cuando una mujer está gestando.
Es por todo esto que se recomienda no someter a la embarazada a lugares con ambientes muy secos, acondicionados o calefaccionados durante largos periodos. Al mismo tiempo, sufrir traumatismo o ciertas afecciones tales como una alteración de coagulación y tener alta presión arterial, pueden ser causantes de las hemorragias de la nariz.
Cómo detener el sangrado nasal durante el embarazo
Si te encuentras sufriendo hemorragia de la nariz estando embarazada se recomienda:
- Sentarse e inclinar levemente el cuerpo hacia adelante sin dejar que la cabeza caiga, es decir, se debe mantener alta, por encima del nivel del pecho.
- Utilizando el dedo pulgar y el índice de la mano que más utilices, presiona de manera firme la parte blanda de la nariz, o sea, cerrando por los orificios nasales.
- Sigue respirando por la boca mientras presionas la nariz sin dejar que se abran los orificios durante 10 o 15 minutos aproximadamente. Es importante no soltar la presión para ver si se detuvo la hemorragia debido a que podría interferir en el proceso de coagulación y requerir de más tiempo.
- Si se tiene la posibilidad de conseguir hielo, se puede aplicar una bolsa sobre la zona para acelerar la coagulación sanguínea.
- Es importante no acostarse ni inclinar la cabeza para atrás, ya que se puede tragar sangre y causar náuseas o vómitos. Si la hemorragia no para luego de 10 o 15 minutos presionando la zona y aplicando hielo, intenta nuevamente realizando todos los pasos y visita a un médico.
Evitar los sangrados nasales en el embarazo
Para evitar que se presenten las hemorragias nasales durante el embarazo se recomienda beber una buena cantidad de agua de forma diaria para mantener al cuerpo y todos sus órganos correctamente hidratados, se debería beber 1,5 litros cada día. Asimismo, si se siente la necesidad de sonarse la nariz es importante hacerlo de forma suave, ya que si se realiza con fuerza puede provocar sangrados muy fácilmente.
Cuando una mujer embarazada necesita estornudar es importante que intente no cerrar la boca completamente para no generar una presión tan grande en la nariz, causando una hemorragia debido al aumento de la presión sanguínea, los vasos débiles y la fuerza del estornudo que hacen una combinación perfecta para el acontecimiento.
Si la mujer se encuentra sometida a un clima muy seco o en invierno, se aconseja utilizar un humidificador. También se puede optar por esta opción si es difícil evitar encontrarse en zonas calefaccionadas. A esto hay que sumarle que es indispensable alejarse de diversos agentes irritantes tales como el humo del cigarrillo.
En caso de sufrir de resequedad en la nariz también se puede utilizar un lubricante para aliviar este síntoma. Lo recomendable es consultar con el médico cuál es el más indicado pero, generalmente, son aquellos lubricantes nasales a base de agua, que pueden conseguirse sin la necesidad de una receta.
Si bien la hemorragia nasal no suele ser un factor importante, es relevante consultar con urgencia con un médico si el sangrado no desaparece luego de mantener la presión y colocar hielo durante 30 minutos, si la cantidad de sangre que sale del cuerpo es excesiva, si la futura madre tiene dificultades para respirar con normalidad, si se sufre una lesión o golpe en la cabeza, la piel se torna pálida o si se sienten molestias en el pecho.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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