La tiroides es un glándula con forma de mariposa situada en la parte inferior del cuello, justo debajo de la nuez de Adán. Esta glándula desempeña funciones muy importantes en el organismo, pues regula el ritmo de muchísimas actividades del cuerpo, las cuales constituyen el proceso del metabolismo. Por ello, cuando su funcionamiento no es el correcto es posible presentar distintos desórdenes tanto a nivel físico y emocional que conviene controlar y tratar médicamente para evitar complicaciones y problemas de salud de gravedad. Entre las principales enfermedades tiroideas, se encuentran el hipotiroidismo, el hipertiroidismo, el bocio, los nódulos y el cáncer de tiroides, y para iniciar el tratamiento lo más temprano posible es importante reconocer los síntomas cuanto antes. Sigue leyendo este artículo de ONsalus y descubre cuáles son todos esos síntomas de problemas en las tiroides que debes conocer.
Funciones de la glándula tiroides
La glándula de la tiroides segrega las hormonas tiroides tiroxina y triyodotironina, las cuales se encargan de regular el metabolismo y la función de los diversos órganos, por lo que son muy importantes para la correcta realización de las actividades fisiológicas del cuerpo.
Las hormonas tiroideas son claves para el crecimiento normal de las células y afectan a la frecuencia cardíaca, a la producción de energía y calor, al peso corporal, a la fuerza de los músculos, a las funciones cognitivas, a los niveles de colesterol, entre otros. Por todo ello es que cuando se sufre de una enfermedad tiroides, pueden resultar dañadas muchas partes del cuerpo y varias funciones del organismo pueden verse alteradas. Descubre a continuación cuáles son todos esos síntomas que pueden indicar que algo no funciona bien en la tiroides y que deben ser motivo de consulta médica.
Cansancio o fatiga constantes
Cuando la glándula tiroides no funciona correctamente y no produce la cantidad suficiente de hormona tiroidea, afección denominada hipotiroidismo, puedes sentirte cansado y fatigado de manera constante y continua en tu día a día. Si existe un problema en las tiroides, este agotamiento será una realidad que te perseguirá todos los días, aún cuando hayas dormido las horas suficientes (entre 7 y 8 horas diarias) o hayas parado para descansar y echarte una siesta.
Ten en cuenta que la glándula tiroides tiene un papel fundamental en el ritmo vital del organismo, los niveles de energía y la fuerza muscular, por lo que padecer de agotamiento habitual puede ser un indicio de que no está funcionando correctamente.
Cambios de peso significativos
Otros de los síntomas que puede evidenciar el padecimiento de alguna enfermedad tiroidea son los que están relacionados con los cambios de peso, ya sea que se produzca un aumento o una pérdida del mismo de manera repentina y sin razón aparente. La tiroides se encarga de regular el metabolismo corporal, por lo que está implicada en el proceso por el cual el cuerpo quema las calorías que se ingieren.
Si lo que se observa es un significativo aumento de peso y la imposibilidad de bajar esos kilos, podría tratarse de hipotiroidismo. Por el contrario, cuando se pierde peso podría ser una señal de hipertiroidismo, afección que ocurre cuando la tiroides produce una mayor cantidad de hormona tiroidea de la que el cuerpo necesita.
Cambios en el estado de ánimo y problemas cognitivos
Tanto si se sufre de hipotiroidismo como de hipertiroidismo, uno de los síntomas frecuentes son los cambios a nivel emocional. Los problemas de tiroides provocan desórdenes hormonales, lo cual puede derivar en cambios repentinos de humor, estado de ánimo bajo, angustia, tristeza, ansiedad e incluso depresión.
Si a pesar de recibir tratamiento para la depresión, no consigues superar la situación y te sigues sintiendo deprimido, es conveniente que consultes de nuevo con el médico y te asegures de la tiroides funciona de manera correcta.
Al desempeñar varias funciones en el organismo, una reducción en la producción de hormonas tiroideas también puede acarrear problemas de memoria y dificultades para mantener la concentración.
Dolores musculares
Los dolores musculares repentinos pueden ser una señal de que la tiroides produce pocas hormonas. Además de estos, el hipotiroidismo también puede ocasionar el padecimiento de dolores en las articulaciones, tendinitis y síndrome del túnel carpiano.
No obstante, conviene señalar que estos dolores corporales pueden ser síntomas de muchas otras afecciones, por lo que habrá que tener en cuenta los demás síntomas que se presenten y acudir al médico para revisar el estado de la glándula tiroides.
Alteraciones en la temperatura corporal, la piel y el cabello
Como hemos comentado anteriormente, una de las funciones de la glándula tiroides es la de regular la temperatura corporal, ayudando así a que el cuerpo se mantenga con el nivel de calor adecuado. Por ello, cuando se tiene una temperatura más baja de lo habitual, se siente frío en el cuerpo cuando los demás no lo sienten o las manos y los pies se encuentran habitualmente fríos, puede ser indicio de problemas en las tiroides y en el funcionamiento del metabolismo.
Por otro lado, el hipotiroidismo es una enfermedad que puede ocasionar alteraciones en el aspecto de la piel, volviéndose esta más reseca y áspera, y en el cabello, causando especialmente sequedad y caída excesiva. Así mismo, también es posible que se observe agrietamiento en las uñas.
Dolor de garganta y ronquera
Si la glándula tiroides se inflama o aumenta de tamaño, condición conocida médicamente como bocio, el paciente puede presentar síntomas como dolores de garganta, tos, ronquera y problemas para tragar con normalidad, entre otros.
Además, en algunos casos, es posible que al tocar el cuello se llegue a notar la presencia de un bulto en la parte delantera.
Alteraciones en la menstruación
Los problemas en las tiroides conllevan una alteración en el metabolismo del cuerpo, incluido también el metabolismo de las hormonas sexuales y, por ello, se pueden observar repercusiones sobre las funciones ováricas, testiculares y reproductivas.
Especialmente, en el caso de las mujeres las enfermedades tiroideas pueden provocar alteraciones en sus ciclos menstruales, presentando desde menstruaciones irregulares hasta un flujo menstrual más o menos abundante de lo habitual, así como periodos más dolorosos. Además de esto, si las hormonas que regulan la ovulación pierden sus ritmos de secreción es posible que ocurra un fallo en el proceso de la ovulación. Consulta con tu ginecólogo si notas alteraciones significativas en tu menstruación.
Estreñimiento o diarrea
Por último, otros de los síntomas que pueden indicar problemas en las tiroides son el sufrimiento de estreñimiento o diarrea. Esto sucede debido a que el aparato digestivo no puede absorber de forma correcta los nutrientes de los alimentos que se consumen y tampoco elimina adecuadamente todos los residuos por el tracto digestivo.
En el caso del hipotiroidismo, se suele padece estreñimiento, y cuando se sufre hipertiroidismo, por el contrario, se tienen más ganas de ir al baño y se pueden presentar diarreas.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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