Cómo producir más leche materna de forma natural
Para las familias, la llegada de los hijos es siempre un evento feliz, aunque para los padres primerizos no deja de ser un momento de muchas dudas. Por supuesto, la adecuada alimentación del bebé es uno de los temas que ocupa a los nuevos padres. Lo más recomendable, según la Organización Mundial de la Salud, es la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida. Sin embargo, para las madres empezar a amamantar puede resultar un poco difícil y una de la mayores preocupaciones en ese momento es si son capaces de producir suficiente leche para alimentar al bebé. Es por eso que muchas madres se preguntan: ¿cómo producir más leche materna de forma natural? En este artículo de ONsalus, abordamos esta cuestión y te ayudamos a encontrar la respuesta aclarando todas tus dudas.
¿Cómo se produce la leche materna?
La leche materna se produce gracias a una cascada de hormonas que se inicia con el nacimiento del bebé, pero ya desde el embarazo el sistema que producirá y almacenará la leche se viene preparando. En el seno, gracias a la secreción de diferentes hormonas estimuladas por la placenta, se desarrolla una red de conductos en cuyo extremo se encuentran los alvéolos, donde la sangre se transformará en leche, conservando azúcares, proteínas y grasas.
De dos a cuatro días después del nacimiento del bebé, la producción de leche materna aumenta considerablemente, es lo que se llama la subida de la leche. Antes de eso, el pecho deja salir el calostro, un fluido amarillento muy nutritivo, también llamado oro líquido. Cuando el bebé succiona, estimula la glándula hipófisis de la madre, la cual produce la prolactina que va a estimular la producción de leche y la oxitocina que estimulará la secreción de la misma, por lo que, entonces, estimular el pecho a través de la succión o utilizando un sacaleches es la mejor respuesta a cómo producir más leche materna naturalmente.
Suele suceder, por ejemplo, que cuando los bebés están en un pico de crecimiento, aumenta la demanda de alimento y por eso ocurre que pasan más tiempo mamando y a veces hasta varias horas. Esto es, simplemente, la manera que tiene el bebé de decirle al cerebro de la madre que necesita que aumente la producción de leche.
Mayor succión para producir más leche materna
Sin duda, aquí es el bebé quien manda, pues mientras más succione, mayor será la producción de leche materna. Hace algún tiempo se recomendaba a las madres dar pecho alternando senos, quince minutos en cada uno y esto cada tres horas más o menos. Quizás está práctica de mirar el reloj se adecue a la alimentación con fórmula, pero en el caso de la leche materna a libre demanda, es el bebé quien decide cuándo inicia, cuándo termina y cuándo repite porción.
De eso se trata la libre demanda, pues el bebé solicita mamar no solo cuando tiene hambre, también lo hace cuando tiene sed, cuando necesita el abrazo de su madre, cuando su sistema inmunológico está peleando contra alguna infección y requiere de anticuerpos, entre muchas otras necesidades que cubre la leche materna.
La realidad es que si la madre escucha la demanda del bebé, se lo pondrá al pecho cada vez que lo pida. Así, a medida que el bebé succione, los senos adaptarán su producción a las necesidades de este. Es importante recordar que la leche materna cambia de composición según las necesidades del bebé. Se han identificado un sinfín de componentes, de hecho, se habla de que la leche está viva y es que sin duda se trata del producto más especializado para el consumidor más exigente.
Algunas familias, ante la duda de estar saciando al bebé, pueden caer en la tentación de ofrecer un complemento de fórmula láctea. Esto quizás pueda ofrecer una tranquilidad momentánea a los padres, pero en la mayoría de los casos es el inicio del fin de la lactancia materna. Esto se debe a que la relación inversa también es cierta: a menor succión, menor producción. Entonces, cada vez que se le da al bebé un biberón de fórmula, se está dejando de estimular el pecho y el mensaje recibido por el cerebro de la madre es que se necesita menos leche. Por ello, ante la pregunta "¿cómo producir más leche materna de forma natural?, la mejor respuesta es poner al niño en el pecho hasta que quede satisfecho, todas las veces que lo pida.
Cuáles son los beneficios de la lactancia materna
La lactancia materna no solo es beneficiosa para el bebé, también lo es para la madre. La Organización Mundial de la Salud recomienda seis meses de lactancia exclusiva y dos años al menos de lactancia con alimentación complementaria. Aunque muchos creen que después del año, los niños no se benefician de la leche materna, en realidad, esta representa al año de edad el 40% de sus requerimientos de energía.
Los beneficios para el bebé no solo se cuentan en esa primera etapa, sino que lo acompañarán a lo largo de su vida. La leche materna contiene todos los nutrientes necesarios para el perfecto desarrollo del bebé, pero además contiene los anticuerpos necesarios para protegerlo de infecciones, ya que al nacer su sistema inmunológico es inmaduro y aún no produce los anticuerpos necesarios.
Para la madre, también es beneficioso amamantar. Por un lado, el peso acumulado durante el embarazo se pierde más rápidamente, ya que esas reservas de grasa pasan a alimentar al bebé. Por otro, repercute positivamente en su salud, pues disminuye la probabilidad de sufrir depresión posparto, anemia, hipertensión y de padecer cáncer de mama o de ovario.
Todo lo anterior redunda en beneficios para la sociedad. En primer lugar, porque al no necesitar ningún tipo de proceso industrial, la lactancia materna no tiene un costo para la familia, ni representa ningún gasto energético. Tampoco hacen falta biberones, esterilizadores u otros utensilios, por lo que supone un ahorro para las familias y para el ambiente.
Mitos sobre la lactancia materna
Son muchos los mitos que existen alrededor de la lactancia y que tienden a confundir y a desanimar a los padres primerizos, pues convierten el amamantar en una cosa muy difícil, en vez de ser un espacio amoroso en el que mamá y bebé se encuentran. Por ejemplo, mucho se dice sobre los alimentos para producir leche materna o sobre lo que la madre debe o no comer, que si debe tomar leche para producir más leche, cerveza, que si no puede comer granos, brócoli o coliflor porque eso le dará gases al bebé. Y así, un sinfín de cosas. Mamá y bebé son ecosistema y la madre debe sentirse bien para proporcionarle ese bienestar al bebé. Entonces, lo mejor sería que la madre lleve una dieta balanceada y que observe cómo va reaccionando su bebé.
El tamaño o la forma de los pechos tampoco es importante, pues lo que vemos es solo el recipiente. La verdad es que todas las mujeres están dotadas de glándulas mamarias y las hormonas necesarias para producir la leche. Aún menos cierto es que amamantar dañará ese recipiente, pues amamantar no hace que los senos se caigan. Esto ocurre por otras razones que nada tienen que ver.
Muchos repiten que el bebé llora porque la leche materna no le llena. Esto puede llevar a la madre a pensar que su leche no es suficiente o no es de buena calidad. Queda decir que el llanto es la única manera que el bebé tiene para avisar a sus padres que algo le incomoda, quizás es hambre, pero podría ser que siente frío o simplemente que quiera estar abrazado a su madre escuchando el latido de su corazón, como cuando estaba dentro de su vientre.
En ONsalus, nos caracterizamos por compartir contenido informativo, por lo que siempre recomendamos consultar a un especialista si las dudas persisten.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
Si deseas leer más artículos parecidos a Cómo producir más leche materna de forma natural, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Embarazo y salud del bebé.