Bulto en la nuca: causas y tratamiento
En muchas ocasiones, la presencia de un bulto en la nuca o en cualquier parte del cuerpo resulta ser una alarma que requiere de asesoría médica para descifrar cuál es la causa de su aparición. En la gran mayoría de los casos, estas lesiones son benignas, pero algunas de ellas pueden resultar graves e incluso ser malignas.
Para muchas personas estas alteraciones pasan desapercibidas, ya que no pueden verse a simple vista, sin embargo, al tocarlas es posible encontrarlas. Las características que presentan estos bultos, si son dolorosos o no y su ubicación pueden ayudar a descubrir la causa de su aparición.
Existen muchas causas capaces de desencadenar la aparición de un bulto en la nuca, estas van desde un simple quiste hasta la presencia de tumores en los que su resolución deben ser de tipo quirúrgico. En este artículo de ONsalus, conocerás mucho más acerca de bulto en la nuca: causas y tratamiento.
Tengo un bulto en la nuca: ¿qué puede ser?
La nuca es la región que se encuentra en la parte posterior y superior del cuello, es el lugar donde se une la cabeza con el cuello. Es allí donde puede darse la presencia de lesiones conocidas como bultos que, en ocasiones, se consideran normales pero en determinados momentos llegan a generar preocupación de acuerdo a su apariencia, ubicación y sintomatología.
Muchas de estos bultos aparecen de repente, algunos pasan desapercibidos, mientras otros se hacen sentir generando al paciente preocupación e incertidumbre. Algunos se originan por alteraciones del sistema inmune, problemas de piel, acumulación de grasa en la zona, procesos infecciosos, inflamatorios o lesiones tumorales. En el siguiente apartado, explicamos todas las posibles causas de un bulto en la nuca.
Por qué tengo un bulto en la nuca - Causas médicas
Existen una gran variedad de causas que provocan la aparición de lesiones que dan origen a los bultos en la nuca, dentro de ellas es preciso mencionar:
Inflamación de los ganglios linfáticos
La inflamación de los ganglios linfáticos en la nuca o cuello puede producirse por procesos infecciosos bacterianos o virales, capaces de producir alteraciones en la zona como faringitis, laringitis, infecciones de la piel, enfermedades como tuberculosis, sífilis e incluso afecciones de tipo viral como mononucleosis, enfermedades eruptivas sarampión, rubeola, toxoplasmosis.
Asimismo, el lupus o la artritis pueden desencadenar el aumento de volumen de los ganglios linfáticos, así como también el consumo de algunos medicamentos.
Causas congénitas
En este caso, el bulto en la nuca está presente desde el momento del nacimiento, aunque algunos de ellos pueden aparecer mucho después. Son más frecuentes en los niños y mucho menos en los adultos. Entre estas causas, se encuentran:
- Quistes del conducto tirogloso: este quis te se presenta en la parte media y alta del cuello, su descubrimiento se hace durante la infancia o en la edad adulta a partir de los 20 años. En la mayoría de los casos, esta lesión tiene que ver con un proceso infeccioso.
- Quistes braquiales: esta lesión es frecuente en los niños y se debe a la presencia de restos embrionarios en la región de la nuca. Estos quistes no representan ningún problema para la salud, su tamaño puede variar debido a la presencia de un proceso infeccioso.
Trastornos vasculares
En este caso, las lesiones tumorales o hemangiomas en los vasos sanguíneos resultan ser benignas.
Quistes sebáceos
Son protuberancias benignas de la piel que se producen por obstrucción de la glándula sebácea. El sebo debajo de la piel da origen a este aumento de volumen, el cual puede llegar a ser doloroso en el momento que se infecta.
Lipomas
Son producidos por la acumulación de grasa, son lesiones benignas al igual que los trastornos vasculares. En la gran mayoría de los casos, no provocan síntomas. Puedes ver más detalles en el artículo Lipoma en el cuello: causas, síntomas y cómo quitarlo.
Lesiones cancerígenas
En este grupo se encuentran los tumores de la tiroides, de las amígdalas o de la lengua, así como de las glándulas salivales y de las paratiroides.
Linfoma
Esta es una lesión cancerígena, tiene su origen en el sistema linfático y se desarrolla sin ningún tipo de control.
Presencia de metástasis
Este tipo de alteración puede aparecer en la región de la nuca como una respuesta a una lesión tumoral ya existente en otra parte del cuerpo.
Bulto en la nuca: diagnóstico
Para hacer el diagnóstico preciso de bulto en la nuca se requiere de evaluación médica especializada de acuerdo a los síntomas que presente el paciente. Esto iniciará con el examen físico donde se examinará de forma exhaustiva el tipo de lesión presente en la región de la nuca u otra parte del cuerpo. Luego, se procederá a solicitar estudios que complementen el diagnóstico, entre ellos se encuentran:
- Estudios de laboratorio como muestras sanguíneas.
- Radiografía, ecografía, tomografía computarizada.
- Biopsia de ganglios o de la lesión especifica ubicada en la nuca.
Tratamiento para el bulto en la nuca
El tratamiento del bulto en la nuca va a depender única y exclusivamente del diagnóstico obtenido por el médico especialista.
En los casos donde exista la presencia de un quiste de origen congénito, este debe ser extirpado quirúrgicamente; en otros casos, cederán solos o con tratamiento médico. Hay algunas situaciones donde la persona puede vivir con la lesión debido a que no supone ningún peligro para su vida.
En los casos donde el bulto en la nuca sea producto de una lesión cancerígena, se debe acudir al oncólogo que es el especialista encargado de tratar el cáncer, él indicará el tratamiento que la lesión requiere según sea necesario, bien sea quimioterapia o radioterapia.
Si se trata de un proceso inflamatorio, el tratamiento será sintomático, se indicarán analgésicos y antiinflamatorios.
La presencia de un bulto en la nuca puede generar incertidumbre, por ello, lo aconsejable es acudir al médico de confianza para obtener el diagnóstico preciso y, de esta manera, iniciar el tratamiento adecuado en cada caso.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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