Cómo destapar los oídos de agua

Las causas de la sensación de agua en los oídos son muy variadas, entre ellas, se encuentran:

• Duchas prolongadas sin protección auditiva.
• Sumergirse en el mar o piscinas sin el uso de protectores como gorros o tapones auditivos, lo que ocasiona que el agua que entra quede represada en su interior.
• Procesos infecciosos de oído, nariz o garganta que pueden dar origen a la secreción de líquido que se acumule en esta zona.
• Traumatismos auditivos que ocasionan la ruptura de la membrana timpánica, esto trae como consecuencia la secreción y acumulación de líquido en la cavidad auditiva.

La presencia de agua en el oído puede detectarse de la siguiente manera:

• Sensación de líquido en el oído: esto se percibe como si fuera un murmullo que emana desde el interior del oído.
• Picazón.
• Cambio de coloración del pabellón auricular.
• Disminución de la audición.

Si el agua no es evacuada con el paso de los días, se puede presentar:

• Dolor: este signo indica que se puede estar iniciando un proceso infeccioso en la cavidad auditiva, puede sentirse en la cabeza o al masticar.
• Náuseas y mareos.
• Aumento de volumen de los ganglios linfáticos que se encuentran cercanos al oído.
• Picazón.
• Salida de líquido del oído, este puede llegar a ser amarillo como pus.
• Afectación total de la audición.

Existen diferentes formas de destapar los oídos de agua, en primera instancia, es recomendable:

1. Inclinar la cabeza hacia el lado que está afectado, se debe sostener aire en la boca y empezar a saltar hasta que se logre la evacuación del agua contenida en el oído.
2. También se puede colocar un poco de agua tibia en el interior del oído que se encuentra tapado mediante el uso de una jeringa sin aguja. Esto permite que se dilate la zona, de esta manera, se elimina la burbuja de aire que se formó, logrando así que el agua alojada en el interior del oído salga fácilmente.
3. Del mismo modo, se puede abrir la boca lo máximo que se pueda, como si se estuviera bostezando o moviendo la mandíbula, solo así, los músculos aumentan la cavidad del oído externo y el agua puede salir.

Cuando alguna de las técnicas mencionadas anteriormente no funcionan, puedes recurrir a algunas de las siguientes medidas para ayudar a destapar los oídos de agua:

• Masticar chicle pone en movimiento los músculos de la mandíbula, de esta forma, se mueve el oído y el agua que se encuentra en su interior puede salir.
• Asimismo, acostarse del lado donde se encuentra tapado el oído puede ayudar a que el agua salga.
• La técnica de la evaporación consiste en utilizar un secador de mano. Este se enciende y se coloca en el mínimo de aire y de temperatura a una distancia prudencial del oído, se mueve el secador hacia adelante y atrás distribuyendo el aire en todo el oído. Con esto, se logra evaporar el agua que se encuentra en el interior del conducto auditivo.

En el caso de que nada de lo anterior funcione, lo mejor es que acudas a la farmacia para que te proporcionen unas gotas para sacar el agua del oído o al médico para evitar, así, que se desarrolle una infección.

Cuándo ir al médico

Es importante señalar que las medidas anteriores pueden resultar útiles cuando hay acumulación de agua en el oído después de bañarse o ir a la piscina o la playa. Ahora bien, si la sensación de tener agua en el oído aparece sin haber tenido contacto previo con el agua, es fundamental acudir al médico y evitar probar ninguna de estas medidas para destapar los oídos, pues es probable que sea indicio de infección en el oído. Consulta rápidamente con el médico si, además, presentas alguno de estos síntomas:

• Dolor de oído.
• Dificultad para escuchar correctamente.
• Fiebre.
• Malestar general.
• Vómitos.

El uso de agua oxigenada no está indicado para sacar el agua del oído, debido a que su uso, en todo caso, puede aconsejarse en los casos donde la obstrucción sea ocasionada por un tapón de cerumen. Es ahí donde el peróxido de hidrógeno o agua oxigenada sí puede utilizarse, ya que contribuye a disolver el cerumen acumulado en la cavidad auditiva. Eso sí, en el caso de utilizarla, es importante diluirla previamente en 50% de suero fisiológico y asegurarse de que no existe una perforación timpánica. Se pueden aplicar 3 gotas de esta mezcla unas 3 veces al día durante 5 días antes de la extracción del tapón de cera.

En conclusión, podemos decir que el agua oxigenada puede ocasionar algunos problemas en los casos donde esté presente una infección o daño en el oído, por lo que no es recomendable su empleo para destapar el oído que se encuentre lleno de agua.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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