Voltaren o Enantyum para lumbalgia, ¿cuál es mejor?

Antes de tomar cualquier medicamento para esta afección, es indispensable conocer la etiología, es decir, el origen del dolor. Determinar la causa es esencial, ya que el tratamiento debe enfocarse en ella, lo cual requiere estudios complementarios y una evaluación médica personalizada para establecer la frecuencia y la dosis exacta de medicación.

La lumbalgia es un trastorno musculoesquelético que se caracteriza por un dolor que generalmente se focaliza en la parte baja de la columna. Aunque el área lumbar es la más afectada, el dolor también puede sentirse en los glúteos y limitar la funcionalidad del paciente.

No obstante, no todos los casos de lumbalgia son iguales. Algunas veces, el dolor puede ser de intensidad moderada o leve, aparecer de manera repentina o desarrollarse progresivamente, y afectar al paciente de manera local o generalizada.

Esta condición se clasifica en tres categorías: aguda, cuando el dolor dura menos de un mes y desaparece por sí solo; subaguda, si persiste de uno a tres meses; y crónica, cuando se prolonga por más de 12 semanas sin alivio.

Por ello, antes de optar por un medicamento, el médico debe considerar estos aspectos y otros factores, como las actividades que realiza la persona y su postura, ya que cada caso es particular.

El Voltaren es un antiinflamatorio muy conocido que se prescribe para aliviar dolores y disminuir los cuadros inflamatorios. En el mercado, se pueden encontrar diferentes presentaciones, tales como comprimidos, geles o pomadas.

Las personas que sufren de lumbalgia podrían recurrir al Voltaren, pero si el dolor no se calma en un máximo de 48 horas, entonces deben acudir al médico para una evaluación más completa.

El principio activo del Voltaren es el diclofenaco sódico, y es uno de los antiinflamatorios más vendidos por su capacidad para reducir el dolor. Sin embargo, no es apto para todas las personas; por ejemplo, quienes sufren de hipertensión deben consultar con el médico antes de usarlo.

Además, el Voltaren también funciona aliviando otros tipos de dolor, como los dolores de cabeza, muelas y migrañas, y reduce la sensibilidad y la rigidez asociadas con condiciones como la artritis reumatoide y la osteoartritis.

El Enantyum es otro analgésico y antiinflamatorio potente cuyo principio activo es el dexketoprofeno. Suele indicarse en casos de dolores musculares, articulares o postoperatorios. Sin embargo, debido a que sus efectos secundarios pueden ser intensos, no siempre es la primera opción prescrita.

Este fármaco también tiene propiedades antipiréticas, es decir, regula la temperatura en casos de fiebre. Aunque pertenece a la familia de los AINE, el Enantyum se reserva para casos muy particulares, sobre todo cuando el dolor es agudo, ya que su acción es potente y sus efectos secundarios pueden ser igualmente fuertes.

De hecho, este fármaco solo se puede adquirir con receta médica y no se debe automedicar. Además, no se puede ingerir por largos períodos de tiempo.

Cuando se consume Enantyum, su principio activo, el dexketoprofeno, se dispersa a través del sistema circulatorio y es capaz de modificar el comportamiento de las células que encuentra a su paso. Específicamente, actúa bloqueando la síntesis de las prostaglandinas, encargadas de la transmisión de los impulsos eléctricos asociados al dolor.

Por ello, el Enantyum puede calmar el dolor al impedir que las neuronas transmitan señales al cerebro, pero no ofrece una cura. Este fármaco suele ser una de las últimas opciones consideradas por los médicos para tratar la lumbalgia, y su uso no se debe prolongar por más de una semana.

Estos dos fármacos son antiinflamatorios no esteroides (AINEs), con principios activos diferentes, lo que hace que uno pueda ser más adecuado para una persona que para otra, dependiendo de las condiciones específicas del paciente. El principio activo del Voltaren es el diclofenaco, mientras que el del Enantyum es el dexketoprofeno, y ambos sirven para reducir la inflamación y el dolor.

La elección de Voltaren o Enantyum para la lumbalgia puede depender de diversos factores como los siguientes:

• Eficacia: dependiendo de cómo el cuerpo metaboliza el medicamento, algunas personas podrían obtener mejores resultados con el diclofenaco, mientras que otras podrían considerar que el dexketoprofeno les funciona mejor.
• Duración del efecto: en cuanto a la duración del efecto, el diclofenaco, presente en el Voltaren, puede tener un efecto más prolongado que el dexketoprofeno, encontrado en el Enantyum. Esto es importante porque permite que las dosis de diclofenaco se administren en menor frecuencia a lo largo del día.
• Efectos secundarios: los dos principios activos pueden provocar efectos secundarios renales, gastrointestinales y cardiovasculares. Sin embargo, estos dependen también del estado general de salud de la persona, especialmente si hay condiciones preexistentes. Por esta razón, es fundamental contar con la opinión del médico, quien tiene acceso a tu historia médica personal y conoce otros medicamentos que puedas estar tomando, lo que le permite determinar con precisión si podría haber interacciones.
• Tiempo de acción: el dexketoprofeno actúa más rápidamente, lo cual puede ser útil en pacientes con dolor agudo para obtener un alivio casi inmediato.

En el caso particular de la lumbalgia, el especialista decidirá en consulta qué fármaco es más apropiado, considerando la situación médica específica del paciente. No se recomienda la automedicación, especialmente, debido a los riesgos asociados.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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