Alimentos para subir las plaquetas
Las plaquetas son unas células sanguíneas que colaboran en el proceso de coagulación de la sangre y su trabajo es fundamental para evitar problemas graves como hemorragias internas. Los valores normales de plaquetas en el organismo suelen ser de entre 150.000 y 450.000 pero ciertas patologías, tratamientos u otros factores pueden provocar que los niveles de plaquetas desciendan.
Cuando se obtiene un conteo bajo de plaquetas en un examen de sangre es imprescindible recurrir a la supervisión médica, pero es cierto que la alimentación puede convertirse en un buen aliado y ayudarte a mejorar los niveles. En ONsalus te traemos toda la información sobre este problema, y un listado de alimentos para subir las plaquetas y fortalecer así tu salud.
Causas y síntomas de las plaquetas bajas
Estos valores pueden bajar por distintos factores, desde enfermedades e infecciones graves, hasta ciertos tratamientos médicos. Entre todas estas causas podemos encontrar el VIH, el dengue, la anemia por falta de hierro, folato o vitamina B12, enfermedades hepáticas como la cirrosis, la leucemia, la quimioterapia y el uso de ciertos fármacos. La dieta también es un factor a tener en cuenta; una mala alimentación carente de ciertos nutrientes puede aumentar las posibilidades de sufrir este problema.
Los síntomas más comunes que suelen aparecer ante la bajada de plaquetas son el cansancio y la fatiga, pequeñas erupciones y hematomas frecuentes y el riesgo de hemorragia interna, pudiéndose presentar sangrado en la boca, nariz y encías.
Dieta para subir las plaquetas
Es importante tener en cuenta que un cambio en la alimentación puede ser más o menos efectivo en función de cuál sea la causa que provoca las plaquetas bajas. Una dieta mejorada puede ser muy eficaz, por ejemplo, en casos de dengue o anemia, pero menos en el de la leucemia. Si quieres saber más sobe cómo subir las plaquetas para esta condición específica te invitamos a leer nuestro artículo alimentos para subir las plaquetas por quimioterapia.
Ante un problema de plaquetas bajas, procura evitar productos procesados como dulces, bollería industrial, refrescos o embutidos y alimentos refinados como pan blanco o azúcares. El alcohol también puede contribuir a una disminución de plaquetas. Por eso, opta por alimentos que te aporten vitaminas y minerales y ayuden a tu cuerpo a generar más trombocitos. A continuación te dejamos un ejemplo de dieta para subir las plaquetas:
Desayuno
- 1 tortilla de vegetales
- 1 vaso de zumo de naranja
- 2 rebanadas de pan tostado integral
Comida:
- Ensalada de garbanzos con espinacas
- 1 vaso de zumo de zanahoria con remolacha
- 1 yogur desnatado con semillas de chia
Cena:
- Crema o puré de zanahoria
- Pechuga de pollo
- Frutas: uva, arándanos o piña
Alimentos recomendados
A continuación te dejamos un listado de algunos alimentos que debes tener presentes en función del nutriente que te aportarán:
- Vitamina K: las verduras de hoja verde como espinacas, brócoli, lechuga o coles son ricas en vitamina K, imprescindible para la correcta coagulación de la sangre. Además te aportarán multitud de nutrientes más como fibra, ácido fólico, potasio o magnesio.
- Hierro: en casos de anemia es esencial subir el nivel de hierro del organismo, por lo que alimentos como las lentejas, canónigos, espinacas, pimiento rojo, hígado y guayaba pueden ser de gran ayuda.
- Folato: esta vitamina del grupo B también cumple un papel importante en la salud celular de nuestro cuerpo y por eso influye en el nivel de plaquetas. Lo encontrarás en alimentos como los espárragos, naranjas, garbanzos o cereales integrales.
- Vitamina C: este nutriente no solamente contribuirá a mejorar tus valores de plaquetas, sino que fortalecerá tu sistema inmunológico. La puedes encontrar en multitud de frutas como el kiwi, las fresas, el limón o la naranja. No hay nada más vitamínico que un zumo natural de frutas.
- Proteínas: los especialistas recomiendan optar por una dieta rica en proteínas para aumentar el número de plaquetas. El pescado, el pollo, la ternera, el pavo y el huevo te proporcionarán las proteínas necesarias en tu organismo.
- Minerales: una buena combinación de varios minerales no puede faltar en nuestra dieta. Consumiendo zanahoria, apio y remolacha obtendrás potasio, fósforo, magnesio, yodo, calcio y hierro, entre otros. Pruébalos crudos en una ensalada o en forma de crema.
Recuerda que una dieta variada y equilibrada influye positivamente en este problema, pero no sustituye el tratamiento médico. Consultar a un especialista te permitirá conocer el origen del problema y valorar las posibles medidas a tomar.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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