Clítoris hipertrofiado: causas y tratamiento
La hipertrofia del clítoris o clitoromegalia es una afección en la que las mujeres que la padecen presentan una anomalía en el clítoris, que es más grande de lo común. El clítoris de las mujeres con clitoromegalia puede asemejarse a un pene pequeño. Esto hace que pueda afectarlas emocionalmente o les cree inseguridad. Además, las relaciones sexuales podrían ser dolorosas, sobre todo cuando además del clítoris la mujer presenta un capuchón demasiado grande. No se debe confundir la clitoromegalia con el aumento del clítoris producido durante el acto sexual, en cuyo caso se debe a un aumento de riego sanguíneo por la excitación. El clítoris hipertrofiado se puede tratar mediante intervención quirúrgica. En este artículo de ONsalus te hablaremos sobre el clítoris hipertrofiado: causas y tratamiento.
Causas del clítoris hipertrofiado
El clítoris se encuentra en la unión de los labios menores de la zona genital femenina. Tiene muchas terminaciones nerviosas por lo que ocupa un importante papel en el orgasmo femenino. Sin embargo una hipertrofia del clítoris no dará más placer, sino todo lo contrario. El clítoris hipertrofiado puede deberse a varios factores:
Causas congénitas
Principalmente la causa suele ser congénita debido a un aumento exagerado de los niveles de testosterona o trastornos hormonales. Los aparatos reproductores masculino y femenino se desarrollan durante el embarazo y el desarrollo del feto respondiendo a la influencia de hormonas femeninas (estrógeno) o masculinas (testosterona). Cuando una mujer padece hipertrofia del clítoris se debe a que sus niveles de andrógeno (hormona que provoca la aparición de los caracteres secundarios masculinos) son muy altos. Si no descienden estos niveles puede causar que los genitales externos se masculinicen haciendo que el clítoris se alargue. Esto da lugar a la clitoromegalia o clítoris hipertrofiado. Durante la excitación sexual el clítoris podría alargarse como cuando un hombre tiene una erección. Esto se debe a que en condiciones normales durante la excitación el clítoris se agranda, pero si ya de por sí es más grande de lo normal podría verse incrementado en la excitación.
Problemas endocrinos
Sin embargo, también puede deberse a problemas endocrinos de las glándulas suprarrenales. Los andrógenos también son segregados por la corteza suprarrenal de las glándulas suprarrenales por lo que un trastorno de éstas podría causar la hipertrofia del clítoris.
Consumo de esteroides o fármacos
Otra de las causas del clítoris hipertrofiado son los esteroides androgénicos anabolizantes que muchas mujeres deportistas toman para aumentar la masa muscular y el almacenamiento de energía. El consumo de ciertos medicamentos o la aparición de un tumor que produzcan andrógenos también son causas de la clitoromegalia. A menudo la hipertrofia del clítoris va asociada a la hipertrofia del capuchón.
Clítoris hipertrofiado y las relaciones sexuales
Un clítoris hipertrofiado puede causar molestias no sólo físicas sino sobre todo emocionales. Su característica forma similar a la de un pene de pequeño tamaño puede hacer que la mujer que lo padece se sienta avergonzada. Además, si es congénito, acompaña a la mujer toda su vida por lo que la niña a ciertas edades puede verse acomplejada.
También puede causar molestias funcionales a la hora de mantener relaciones sexuales ya que estas pueden ser dolorosas. La mujer que sufre relaciones sexuales dolorosas puede achacar el dolor a las relaciones y, por ende, no querer volver a tener relaciones sexuales. O puede acabar convirtiéndose en una disfunción sexual. Las mujeres con un capuchón demasiado grande podrían sentir más dolor en los encuentros sexuales además de una pérdida de sensibilidad de la zona erógena.
Clitoromegalia: operación
El clítoris hipertrofiado se trata mediante intervención quirúrgica. Esta cirugía se llama clitoroplastia y es una operación muy sencilla que trata de reducir el tamaño del clítoris. Consiste en eliminar el tejido excesivo y colocar el clítoris de nuevo en su posición correcta. De esta forma el clítoris quedará en la posición correcta con el tamaño adecuado y no debes preocuparte por su función ya que se conserva por completo la sensibilidad erógena.
En la mayoría de los casos no requiere hospitalización y se realiza de forma ambulatoria con anestesia local y sedación. Además, no dura mucho, aproximadamente entre 30 minutos y una hora, y tras la intervención la paciente puede irse a casa.
En muchos casos, el clítoris hipertrofiado no suele ser la única anomalía que se presenta y puede ir acompañado de una hipertrofia de los labios vaginales. En este caso se realizaría otra intervención para solucionar este problema.
Tras la clitoroplastia deberás permanecer en reposo al menos cuatro días, aunque depende de la persona y de la intervención. Es normal que durante algunos días sientas molestias o incluso hinchazón en la zona pero no te preocupes, suele desaparecer con los días. Puedes volver a la vida normal en unos días, aunque las relaciones sexuales deberán esperar hasta pasado por lo menos un mes.
No obstante sigue las indicaciones del médico y cirujano para el postoperatorio.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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