Ardor en el cuerpo por estrés: causas y tratamiento
A día de hoy se le atribuyen al estrés una gran cantidad de enfermedades, y es cierto que el ritmo de vida que elegimos suele tener diversos efectos en el cuerpo y, en muchas ocasiones, nada deseables.
Una de las consecuencias del mal manejo de las situaciones cotidianas y la sobrecarga emocional puede manifestarse como ardor en el cuerpo. Los altos niveles de adrenalina y cortisol en la sangre fomentan una serie de reacciones que pueden causar quemazón, dolores u hormigueos en el cuerpo.
Si quieres conocer todo acerca del ardor en el cuerpo por estrés, no dejes de leer este artículo de ONsalus.
Qué es el estrés
El estrés no es más que una respuesta de adaptación. Tu cuerpo siente una amenaza y se ponen en marcha una serie de procesos para que estés más alerta y dispuesto a actuar. Es algo normal que permite que ante una situación extrema puedas responder de la manera más adecuada, que todo tu cuerpo actúe en consonancia y que, por ejemplo, no tengas ganas de ponerte a comer cuando en verdad debes huir.
Esta respuesta primitiva era vital ante situaciones amenazantes. Si aparecía un tigre era fundamental que la persona amenazada tenga toda su energía disponible para salir corriendo, el corazón lata más rápido y así aumente la circulación, la respiración también se acelere e incluso no aparezca sueño ni hambre, pero ¿qué sucede cuando esas respuestas de alarma se disparan a cada rato o, lo que es peor, están activas permanentemente? Esa sensación permanente de amenaza y miedo son fulminantes para tu cuerpo. A continuación, veremos por qué.
Ardor en el cuerpo por estrés
El estrés puede manifestarse como ardor, quemazón, comezón, hormigueo y hasta adormecimiento en el cuerpo. La sensación de ardor puede presentarse en zonas limitadas de la piel, como en parches, o bien, puede extenderse por toda su superficie. Puede afectar a zonas más profundas y sentirse como una quemazón en los músculos.
Esto se debe a que la adrenalina y el cortisol que circulan en grandes cantidades generan contracción de los pequeños vasos y cambios en la sensibilidad. También puedes notar que la piel está más seca, en consecuencia, más frágil y sensible.
Habitualmente, para llegar a este diagnóstico deben descartarse otras causas de ardor en el cuerpo. Es por ello que suele ser necesaria una revisión médica y, según el caso, otros estudios como: análisis de sangre, de orina, estudios por imágenes.
Existen algunas patologías que causan ardor en el cuerpo y que se han relacionado específicamente al estrés. Algunos ejemplos son:
Fibromialgia
Se trata de dolor/ardor en diferentes zonas del organismo, tanto superficiales como profundas. Se desconoce su causa, pero el empeoramiento de los síntomas se ha vinculado claramente al estrés y a los hábitos poco saludables. Puedes consultar más información en el artículo Fibromialgia: síntomas, causas y tratamiento.
Psoriasis
La psoriasis es una enfermedad inflamatoria de la piel, en la cual aparecen lesiones como parches enrojecidos y con escamas que suelen picar y también arder, sobre todo, cuando aparecen heridas por rascado.
Se suele presentar en brotes, seguidos por momentos de mejoría. Los peores momentos suelen estar vinculados con situaciones estresantes.
Enfermedades autoinmunes
Las defensas son buenas y adecuadas cuando tu organismo está en equilibrio. El estrés, la falta de sueño y la mala alimentación claramente van empobreciendo la salud y ocasionando problemas de distintos tipos.
En algunas personas, las defensas reaccionan de manera inapropiada, con inflamación, atacando a los propios tejidos.
Cómo evitar el ardor en el cuerpo por estrés
Si notas que no estás manejando adecuadamente las situaciones cotidianas y esto activa tu sistema de alarma de manera permanente, tal vez es el momento de hacer algo. A veces, parar por un momento y pensar de qué otra manera podrías enfrentar las cosas puede ser necesario para disminuir el estrés.
Todas las personas deben enfrentar diversas situaciones, pero esto no implica que a todo debas implicarle la misma carga emocional.
Muy a menudo los "problemas" aparecen por miedo o ansiedad a cosas que no han sucedido y tal vez no sucedan o por recordar repetitivamente situaciones que ya han pasado y que no se pueden modificar. Cuando vivimos de esta manera, dejamos de lado lo que realmente estamos viviendo.
El mindfulness, la meditación o simplemente vivir el ahora pueden ayudarte muchísimo. Prestar atención a cada instante y vivir lo que realmente estás viviendo ayuda a disminuir el estrés de una manera muy importante.
Otros consejos que pueden ayudarte a combatir el estrés son:
- Practicar ejercicio.
- Alimentarte sanamente.
- Acomodar tus horarios de modo que puedas mantener rutinas de comidas, descanso, etc.
- Limitar el uso de dispositivos electrónicos: estos generan imposibilidad de conexión con uno mismo, hiperestimulación y aumento del estrés.
- Masajear tu cuerpo con aceite. El de sésamo o el de coco son las mejores opciones. Si el clima es frío, es preferible el de sésamo, ya que al ser más cálido favorece la circulación y provoca relajación muscular.
En el siguiente artículo, puedes ver más consejos para reducir el estrés de manera eficaz.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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