Lunares de carne en el cuello: causas y tratamiento
¿Tienes uno o varios lunares de carne en el cuello y te gustaría eliminarlos? Este tipo de lunares son crecimientos benignos de la piel que no aparecen en consecuencia a la presencia de un virus como las verrugas y, normalmente, son inofensivos. Son unas protuberancias blandas y de color carne o marrón claro que solo aparecen en los pliegues de la piel y que sí pueden resultar muy antiestéticos o incómodos para quienes los presentan. No obstante, en caso de desear eliminarlos, no es conveniente hacerlo por uno mismo, sino que se debe consultar con un dermatólogo para ver cuáles son las distintas posibilidades de tratamiento y evitar causar daños severos en la piel. Si quieres saber cuáles son las causas de los lunares de carne y el tratamiento que se puede llevar a cabo para eliminarlos de manera definitiva, presta atención a este artículo de ONsalus en el que lo explicamos con todo detalle.
Qué son los lunares de carne
Los lunares de carne, llamados médicamente como papilomas cutáneos, acrocordones o fibromas blandos, son protuberancias o crecimientos de carácter benigno que presentan un color carne o marrón claro y que aparecen en aquellas zonas del cuerpo en las que la piel forma pliegues como, por ejemplo, el cuello, las axilas, los párpados, los pechos o los genitales. Son unos crecimientos de consistencia suave, blandos, normalmente pequeños y que no tienden a crecer. Aparecen como resultado del daño en el tejido adiposo y son inofensivos, por lo que al contrario de lo que muchos creen, estas protuberancias no son malignas, no forman parte de la familia de las verrugas ni constituyen una infección con lo que no son contagiosas.
A continuación, detallamos algunas de las principales características de los lunares de carne para que sepas diferenciarlos de las verrugas:
- Los acrocordones son protuberancias blandas mientras que las verrugas son duras.
- A diferencia de las verrugas, los lunares de carne no aparecen en consecuencia de la presencia de un virus, sino por un desarrollo anormal de las células de la piel.
- No son contagiosos ni pueden extenderse.
- Solo aparecen en zonas del cuerpo con pliegues cutáneos.
- Suelen ser de carácter benigno.
- Normalmente, son pequeños y no aumentan de tamaño.
Por qué salen lunares de carne en el cuello - causas
A pesar de que las causas exactas que den respuesta a por qué salen lunares de carne en el cuello u en otras zonas corporales con pliegues cutáneos no están del todo claras, los especialistas señalan que se generan por un desarrollo anormal y acelerado de las células de la piel y que hay una serie de factores que pueden contribuir a su aparición, como los que enumeramos seguidamente:
- Fricción o roce de piel con piel, motivo por el cual se observan en aquellas zonas del cuerpo con pliegues, como el cuello, las axilas, los párpados, los genitales, etc.
- Sobrepeso u obesidad: las personas con sobrepeso tienden a sufrir una irritación continua en algunas partes de su cuerpo por el roce de piel con piel debido al ablandamiento y exceso de piel.
- Diabetes tipo 2: las personas con diabetes tipo 2 son más propensas al desarrollo de estos lunares de carne debido a la sobreproducción de insulina, lo cual puede causar un crecimiento acelerado de las células de la piel y dar lugar, en consecuencia, a este tipo de crecimientos.
- Genética: aquellas personas que cuentan con familiares directos con numerosos acrocordones también son más propensas a desarrollarlos a lo largo de su vida.
- Edad avanzada: los lunares de carne son mucho más frecuentes en personas de edad avanzada, de hecho, unas seis de cada diez personas los presentan a los 70 años.
- Embarazo: algunas mujeres presentan lunares de carne durante la etapa de la gestación y su aparición, en este caso, podría estar asociada a los significativos cambios hormonales que el cuerpo femenino experimenta durante el embarazo.
Lunares de carne que pican: ¿son malos?
Por lo general, los lunares de carne no provocan ningún síntoma específico, aunque sí pueden causar algún tipo de molestia, como irritación o picazón, cuando se enganchan o rozan con prendas de ropa o joyas. Es importante señalar que la picazón de un lunar por sí sola no suele ser un signo de malignidad, pues hay diversas causas que pueden estar detrás de esta comezón como, por ejemplo, las largas exposiciones al sol, el uso de jabones, perfumes o productos de higiene en la zona que resulten irritantes o agresivos para la piel, el uso de joyas en el cuello que provoquen algún tipo de reacción alérgica, la sequedad de la piel, sudoración excesiva, etc.
Sin embargo, cuando un lunar además de producir picor, va acompañado de otros síntomas como dolor y cambios significativos en su color, textura o tamaño, sí que es conveniente acudir al dermatólogo con urgencia para averiguar cuál es su naturaleza y descartar cualquier tipo de malignidad. Algunas de las señales que pueden alertar de que un lunar podría ser de carácter maligno son:
- Es asimétrico.
- Presenta bordes irregulares, desiguales o poco definidos.
- Presenta un diámetro mayor a 6 milímetros.
- Presenta un color poco uniforme e incluso con una combinación de varios tonos, como café, marrón, negro o con zonas rojizas o blancas.
- Su tamaño, forma o color van cambiando y evolucionando rápidamente.
Para más información, te aconsejamos que consultes el artículo Consejos para detectar un lunar maligno.
Cómo eliminar lunares de carne abultados en el cuello
Ahora que ya sabemos cuáles son las causas de los lunares de carne el cuello y que se trata de crecimientos de la piel benignos, debemos aclarar que no es necesario extirparlos ni recibir un tratamiento específico. No obstante, muchas de las personas que los presentan buscan cuáles son las mejores formas de eliminarlos por motivos de estética o comodidad. En este caso, siempre es recomendable programar una visita con un dermatólogo profesional e informarse acerca de las distintas técnicas existentes para eliminar los lunares de carne de forma segura y con éxito.
Los métodos que suelen utilizar los dermatólogos para quitar los lunares de carne en el cuello son los siguientes:
- Crioterapia: los acrocordones se congelan mediante la aplicación de nitrógeno líquido y pasados unos días o semanas, estos lunares se desprenden.
- Electrocirugía: los fibromas se cortan y queman usando un bisturí eléctrico. Este es un procedimiento que se lleva a cabo con anestesia local.
- Cirugía: aquellos lunares de carne de mayor tamaño suelen extirparse mediante unas tijeras o bisturí y, en este caso, también se utiliza anestesia local. En algunos casos, puede ser necesario dar algunos puntos de sutura.
Una vez realizado el tratamiento de los lunares de carne adecuado en cada caso, es importante mantener la zona afectada protegida de la exposición solar para evitar, así, que durante los primeros meses se produzcan cambios en la pigmentación de la piel.
Por último, no debemos olvidar que los acrocordones o fibromas blandos no son verrugas, por lo que esos productos antiverrugas disponibles en farmacias no sirven para tratarlos. Cuando se quieran eliminar los lunares de carne, la mejor opción es acudir a un dermatólogo profesional para informarse de cuál es el mejor tratamiento para cada caso en particular.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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