Molestias en el ano y gases: causas y tratamiento

La constipación, también conocida como estreñimiento, es una alteración del ritmo intestinal que se manifiesta por una disminución en la frecuencia de las deposiciones o por la dificultad para evacuar. Se caracteriza por molestias abdominales, heces duras, secas o grumosas, evacuaciones dolorosas o que requieren esfuerzo, y una frecuente sensación de evacuación incompleta. Esta condición puede generar presión en la zona rectal y provocar la acumulación de gases, lo que incrementa la incomodidad.

Tratamiento

Se inicia realizando cambios en el estilo de vida como, por ejemplo, añadir fibra a la dieta para controlar el estreñimiento y beber mucha agua.

La diarrea se manifiesta como evacuaciones blandas y acuosas que ocurren varias veces al día. Cuando dura entre uno y dos días, se considera aguda; si persiste durante dos a cuatro semanas, se clasifica como persistente. En algunos casos, puede volverse crónica si se prolonga por más de cuatro semanas, pudiendo presentarse de forma intermitente, con episodios que aparecen y desaparecen.

La diarrea puede acompañarse de malestar abdominal, gases y una sensación de debilidad general, especialmente cuando el número de evacuaciones es elevado a lo largo del día.

Tratamiento

El tratamiento consistirá en:

• Dieta blanda.
• Medicamentos antidiarreicos.
• Probióticos.

Si la diarrea es persistente o crónica, el médico se encargará de realizar estudios de las heces para indicar medicamentos de acuerdo al caso que presente.

Consiste en la inflamación de las venas ubicadas alrededor del ano, las cuales pueden ser internas o externas. Esta afección puede causar molestias o presión en la zona anal, dolor, picazón, gases y, en algunos casos, sangrado.

Tratamiento

De inicio, el tratamiento es el siguiente:

• Dieta rica en fibra.
• Beber abundante agua.
• No hacer esfuerzo durante las evacuaciones.
• Tomar analgésicos de ser necesario.
• Realizar baños de asiento con agua tibia varias veces al día para aliviar el dolor.

Si con lo anterior no mejora, el médico indicará la realización de algunos procedimientos como la escleroterapia o una cirugía como la hemorroidectomia.

La fisura anal es una pequeña ruptura o desgarro en la mucosa que recubre el ano. Suele ir acompañada de sangrado rectal y un dolor intenso que puede persistir durante horas después de la evacuación. El estreñimiento es una causa común, aunque también puede deberse a traumatismos en la zona anal, como los que ocurren durante un parto difícil.

Tratamiento

Si la fisura anal es aguda, se cura por sí sola con baños de asiento con agua tibia y una dieta rica en fibra. En caso de que no mejore, el médico recomendará la realización de una cirugía para restablecer los tejidos afectados.

La fístula anal es un pequeño canal anormal que se forma entre el interior del ano y la piel circundante. Esta condición puede causar:

• Dolor.
• Fiebre.
• Diarrea.
• Gases.
• Pérdida de peso.
• Pus, sangre o heces con mal olor.

Tratamiento

Algunas fístulas pueden cicatrizar por sí solas sin necesidad de una cirugía. En caso contrario, el médico sugerirá la resolución quirúrgica.

La diverticulitis se trata de la formación de sacos o bolsas en el intestino grueso. Las heces y las bacterias se introducen en uno de estos sacos llamados divertículos provocando inflamación o infección.

Los síntomas que acompañan esta afección son:

• Fiebre.
• Escalofríos.
• Náuseas
• Vómitos.
• Dolor abdominal severo.
• Gases.

Tratamiento

• Tomar líquidos durante uno o dos días.
• Analgésicos.
• Antibióticos.
• Resolución quirúrgica.

La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es una afección crónica que provoca inflamación del tracto digestivo. Dentro de este grupo de enfermedades se incluyen dos patologías principales: la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, las cuales afectan distintas partes del intestino y pueden causar síntomas como dolor abdominal, diarrea, fatiga y pérdida de peso.

Esta afección es autoinmune, esto significa que el sistema inmune ataca los tejidos sanos causando:

• Dolor abdominal.
• Diarrea con sangre en ocasiones.
• Gases.
• Urgencia para evacuar.
• Sangrado rectal.
• Pérdida de peso.
• Anemia.

Tratamiento

• Medicamentos orales.
• Medicamentos biológicos.
• Enemas.
• Supositorios.
• Modificaciones del estilo de vida.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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