Flujo con sangre sin tener la regla: causas

Entre los efectos secundarios de las pastillas anticonceptivas resalta el sangrado intermenstrual, al punto que se cree que el 50% de las mujeres que utilizan este método presentan flujo con sangre entre reglas durante los 3 primeros meses de tratamiento. A esta secreción se le conoce médicamente como "manchas de la píldora" y es una reacción normal del organismo mientras se acostumbra a la dosis hormonal.

Cuando el sangrado entre reglas no se detiene después de los 3 primeros meses de consumo de la píldora, resulta importante acudir al médico para consultar si será necesario o no cambiar de pastilla, de tipo de hormona o de carga hormonal.

Las mujeres que utilizan el dispositivo intrauterino como método anticonceptivo también observarán variaciones en su menstruación y flujo con sangre sin tener la regla. Por lo general, el DIU hormonal tiende a suprimir las menstruaciones, pero mientras esto ocurre el útero va secretando todo el tejido acumulado en reglas pasadas, razón por la que es común que se presenten también reglas muy oscuras o casi negras. El color de estas secreciones se debe a que se está expulsando sangre vieja. Una vez que el cuerpo se acostumbra a la presencia y efecto del DIU, los sangrados son cada vez menos frecuentes y la menstruación es menos abundante.

Cualquier variación importante en las emociones de la mujer puede interferir en la producción de hormonas femeninas, alterando el ciclo menstrual y causando flujo con sangre sin tener la regla. Muchas veces la mujer no está consciente de que está atravesando un período de mucho estrés, pero su cuerpo sí percibe su estado mental y reacciona alterando cualquier proceso biológico.

El estrés un mal manejo de las emociones son causas de muchas enfermedades y están asociados a ciclos menstruales irregulares. Que no te parezca extraño el sangrado entre reglas si has estado con mucha carga laboral, has tenido problemas con tu pareja o presentas alteraciones del sueño. Retomar la paz mental es necesario para que todo tu ciclo y tu cuerpo vuelva a la normalidad. En el siguiente artículo, mostramos algunos consejos para reducir el estrés.

La tiroides es una glándula localizada en el cuello que se encarga de secretar las hormonas tiroxina y triiodotironina, sustancias que son esenciales para el buen funcionamiento del organismo. Cualquier desorden en la producción de estas hormonas puede incidir negativamente en el ciclo menstrual de la mujer, causando reglas irregulares, síndrome premenstrual, dolor abdominal y ovarios poliquísticos.

Cuando la tiroides actúa de manera hipoactiva, se considera que la persona sufre de hipotiroidismo y cuando actúa de forma hiperactiva se habla de hipertiroidismo. Cualquiera de estas afecciones puede alterar los ciclos menstruales y causar flujo con sangre sin tener la regla. Ambas enfermedades no tienen cura y requieren de tratamiento y supervisión médica constante.

El síndrome de ovarios políquísticos es una enfermedad producida por un desequilibrio en las hormonas sexuales femeninas que causa cambios en el ciclo menstrual, quistes en los ovarios, dificultad para concebir y otros problemas de salud. Este síndrome provoca que los óvulos maduros producidos por los ovarios no se liberen, sino que permanecen circundados en las glándulas.

Los síntomas que causa esta condición están relacionados con el desorden hormonal y entre ellos encontramos la ausencia de la menstruación, períodos menstruales irregulares, crecimiento de vello corporal en el pecho o el rostro, acné, oscurecimiento de la piel de las axilas, agrandamiento del clítoris, adelgazamiento del cabello, disminución del tamaño de los pechos y sangrados entre reglas. El consumo de pastillas anticonceptivas puede ayudar a controlar esta enfermedad.

En el siguiente artículo puedes informarte sobre los síntomas, las causas y el tratamiento del síndrome de ovarios poliquísticos.

Pólipos uterinos

El endometrio es el tejido que cubre al útero. El crecimiento excesivo de esta capa puede generar la formación de pólipos, masas con forma de dedo que se adhieren a la matriz y pueden ser tan diminutos como una semilla de ajonjolí o tan grandes como una pelota de golf. El útero puede presentar uno o varios pólipos a la vez.

La causa de los pólipos en el endometrio se desconoce, pero la afección está asociada al sobrepeso, tratamientos para el cáncer de mama, terapia hormonal y antecedentes familiares. Cuando una mujer sufre de esta condición, presenta flujo con sangre sin tener la regla, menstruaciones irregulares, hemorragias vaginales y dificultad para quedar embarazada. Lo más recomendable es extraer los pólipos uterinos para disminuir la posibilidad de contraer cáncer.

En el siguiente artículo puedes ver más información sobre los pólipos uterinos: síntomas, causas y tratamiento.

Fibromas en el útero

Los fibromas son tumores benignos muy comunes en las mujeres en edad fértil. Por lo general, están compuestos por células musculares y demás tejidos que se forman en la pared del útero. La causa de estas masas se desconoce, pero la condición también se asocia al sobrepeso y a ser de raza afroamericana.

Los fibromas en el útero no suelen presentar síntomas específicos de esta condición. Las mujeres que tienen esta enfermedad aseguran sentir dolor durante las relaciones sexuales, presentar sangrado entre reglas, tener menstruaciones irregulares, sensación de llenura en la pelvis y dolor en la parte baja de la espalda. Los fibromas deben ser extraídos si aumentan de tamaño con el tiempo e interfieren con la fertilidad femenina, de lo contrario puede que no sea necesaria su extirpación.

Miomas uterinos

Son otro tipo de tumor benigno que crece en la matriz de la mujer y que se asocia a desórdenes hormonales y antecedentes familiares. Se cree que la mitad de todas las mujeres de 50 años tiene miomas en el útero. Es más común que exista un solo mioma en el útero, pero no se descarta que puedan haber más. El tamaño de estas masas puede ser tan pequeño como para ser microscópico o tan grande como para observarse durante un estudio ginecológico.

Entre los síntomas más comunes de esta afección resalta el sangrado entre períodos, menstruación abundante y con presencia de coágulos, periodos prolongados, necesidad de orinar con frecuencia, dolor abdominal y dolores durante las relacione sexuales. El tratamiento depende de la edad de la mujer y puede incluir consumo de pastillas anticonceptivas, colocación de dispositivo intrauterino, analgésicos y terapia hormonal por corto tiempo.

La sequedad vaginal ocurre debido a un desequilibro en la producción de hormonas sexuales femeninas, razón por la que es uno de los síntomas más comunes durante la menopausia.

Cuando la vagina es carente de lubricación natural, sus paredes se secan y se vuelven ásperas, lo cual puede causar infecciones vaginales, dolor al tener relaciones sexuales, dolor después de las relaciones sexuales, sangrado después del sexo, sangrado entre reglas, ardor vaginal y secreciones acuosas.

Muchas mujeres se enteran que están entrando al climaterio gracias a la sequedad vaginal que presentan y al flujo con sangre sin tener la menstruación. Si crees que estás llegando a la menopausia, es importante que acudas a tu médico para encontrar el tratamiento ideal para disminuir los síntomas que causa este proceso natural de tu cuerpo. Para combatir la sequedad vaginal, se recomienda el uso de lubricantes sin aroma y sin sabor.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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