Por qué es importante tener un desfibrilador en casa
El desfibrilador externo automático, también conocido como DEA, es un dispositivo médico de primeros auxilios diseñado para tratar los paros cardiacos de una forma sencilla y segura. Para ello cuenta con una guía de uso y mensajes luminosos y acústicos que dirigen las actuaciones. Además, para mayor tranquilidad, solo recomienda iniciar una descarga en los casos en los que de verdad se necesita. La descarga puede hacer que el corazón retome su actividad normal, salvando la vida de la persona.
Se recomienda la instalación de desfibriladores en lugares muy concurridos, como centros comerciales, espacios deportivos, colegios, aeropuertos, etc. Pero, ¿qué hay de los domicilios particulares? ¿Has pensado en comprar un desfibrilador para casa? En el siguiente artículo de ONsalus, junto a Meduba, que son expertos en desfibriladores y en crear espacios cardioseguros, explicamos por qué es importante tener un desfibrilador en casa.
Razones para tener un desfibrilador en casa
Dada la utilidad e importancia de los desfibriladores para salvar vidas, ¿sería una buena idea contar con uno en el hogar? Estos motivos son los que lo justifican:
- Es habitual que las paradas cardiacas tengan lugar en el propio domicilio.
- Las personas que acompañan en estas situaciones suelen ser familiares. Los sanitarios tardarán un tiempo en llegar.
- La mayoría de los intentos de recuperación que pueden realizar estas personas se hacen sin desfibrilador, como mucho, aplicando una reanimación cardiopulmonar (RCP), que puede resultar insuficiente. En ocasiones, solo el uso del DEA puede reactivar los latidos.
- Los expertos recomiendan la colocación de desfibriladores en lugares estratégicos. Uno de ellos, ya que en él se producen buena parte de los paros cardiacos, es el domicilio particular.
- Un desfibrilador a mano permite intervenir de manera inmediata, mejorando las opciones de supervivencia. Actuar en los primeros minutos puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
- Esta rapidez contribuye a prevenir daños cerebrales asociados a la falta de oxígeno que se produce en la parada cardiaca.
- Hay que saber que el dispositivo solo recomienda la descarga en caso de fibrilación ventricular, por lo que no se pueden dar descargas innecesarias.
- En definitiva, ofrece seguridad y una mayor sensación de control en la familia, sobre todo si en el hogar conviven personas mayores o con más riesgo de sufrir un paro cardiaco.
Cómo son los desfibriladores para casa
No hay un único modelo de desfibrilador para el hogar. Se pueden adquirir portátiles o instalarlos, por ejemplo, en una vitrina. También los hay básicos o con accesorios incorporados, como el dispositivo de llamada al 112. Suelen ser de tamaño pequeño y todos tienen en común que están diseñados para que puedan ser manejados con facilidad por cualquier persona.
Además, incluirán las instrucciones para su uso correcto y se revisarán solos cada cierto tiempo, avisando si hay algún problema que deba subsanarse. Es importante asegurarse de que el DEA escogido sea apto para su uso en el hogar.
Cuándo usar un desfibrilador en casa
Los desfibriladores se utilizan cuando una persona sufre un paro cardiaco. En estas situaciones, su corazón sufre una serie de modificaciones en su actividad eléctrica normal que hacen que deje de bombear la sangre al resto del cuerpo, suponiendo un riesgo de muerte si la situación no se revierte en cuestión de minutos.
De hecho, se considera una emergencia médica grave, pues la sangre rica en oxígeno deja de llegar a los órganos, el cerebro incluido. En esta situación, la persona quedará inconsciente y dejará de respirar. Si no se actúa, el cerebro y otros órganos sufrirán daños. En último caso, fallecerá.
Aunque no todas las personas presentarán sintomatología antes del paro cardiaco, muchas sí manifestarán síntomas como:
- Dolor en el pecho, espalda o abdomen
- Náuseas
- Sensación de mareo
- Falta de aire
- Fatiga extrema, etc.
Este tipo de signos clínicos deberían ya ponernos en alerta y en la búsqueda de asistencia sanitaria.
De todas formas, si tenemos dudas sobre el momento adecuado de su uso, hay que saber que el desfibrilador no solo puede proporcionar descargas, también evalúa la actividad eléctrica del corazón y, con esa información, decide si es necesario o no aplicar descargas y lo comunica a la persona que lo está manejando. En otras palabras, el propio DEA nos dice cuándo debemos usarlo.
Lo primero es comprobar si la persona respira y/o tiene pulso. En caso negativo, hay que llamar a emergencias. Puede hacerlo otra persona, que también iniciará la RCP mientras se prepara el desfibrilador. Una vez encendido, el propio dispositivo irá dando instrucciones precisas para su correcto uso hasta la llegada de la ayuda médica.
Consejos para usar un desfibrilador en casa
Si decidimos instalar un desfibrilador en casa, debemos tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Comprar el aparato a un fabricante con buenas referencias.
- Además de adquirirlo, hay que formarse para saber utilizarlo, con garantía y seguridad, llegado el caso. Todos los miembros del hogar deberían aprender su manejo. También es recomendable conocer la técnica de RCP, pues las personas en paro cardiaco suelen necesitarla, además del DEA.
- Debe estar instalado o guardado en un lugar de fácil acceso para cualquier persona y lejos del alcance de los niños. Mejor en una zona central de la casa, bien visible.
- El desfibrilador requiere un mantenimiento, pues es imprescindible conservarlo en buenas condiciones para que funcione. Hay que revisarlo cada cierto tiempo, cambiar la batería, los electrodos, etc.
Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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