¿Son peligrosas las arritmias?

Responder a esta pregunta resulta muy difícil, porque el nivel de complejidad que sugieren las arritmias dependen del tipo de arritmia que la persona padezca. Como existen varias formas en que se puede ver afectado el ritmo cardíaco y cada una está asociada a causas y condiciones físicas diferentes, la gravedad de las arritmias depende exclusivamente de su origen. Por lo tanto, si nos preguntan si son peligrosas las arritmias, podemos decir que sí, que no y que no tanto. Lo que sí se debe aclarar es que lo más peligroso de las arritmias es que son un trastorno silente que debe ser diagnosticado a tiempo para evitar complicaciones mayores.

La buena noticia es que en ONsalus queremos ayudarte a comprender esta condición cardíaca para que puedas determinar su gravedad en cada caso, por lo tanto comenzaremos por dar a conocer información general sobre las arritmias para después explicar los diferentes tipos y pronóstico. ¡Comencemos!

Las arritmias son un trastorno que afecta el ritmo cardíaco del corazón, causando latidos muy lentos (bradicardia) o muy rápidos (taquicardia). También pueden desencadenar un patrón irregular en los latidos. Las arritmias pueden ser ventriculares o supraventriculares.

• Arritmias ventriculares. Son aquellas que se producen en la cavidad inferior del corazón, es decir, en los ventrículos.
• Arritmias supraventriculares. A diferencia de las anteriores, estas ocurren en la parte superior del músculo, por encima de los ventrículos, y tienen origen principalmente en las aurículas.

Asimismo, la alteración en los latidos puede determinar si la arritmia está acompañada de:

• Bradicardia. Latidos más lentos debido a una frecuencia cardíaca inferior a 60 latidos por minuto. Por lo general, la bradicardia afecta a las personas mayores y puede estar causada por un mal funcionamiento del sistema nervioso que no informa al corazón que debe bombear más sangre. Los medicamentos para la hipertensión también pueden provocar bradicardia.
• Taquicardia. Latidos más rápidos porque la frecuencia cardíaca sobrepasa los 100 latidos por minuto. La taquicardia también puede ser ventricular o supraventricular, dependiendo de si se origina en los ventrículos o en las aurículas del corazón. Si quieres saber más acerca de la taquicardia consulta este artículo en el que te explicamos sus causas, síntomas y tratamiento.

Taquicardia ventricular

Ocurre cuando un fallo en un nódulo del corazón no puede controlar el ritmo cardíaco en los ventrículos y la función de marcapasos natural es ejercida por otras partes del músculo, lo cual causa que el corazón no lata de manera normal. Esta arritmia está acompañada de mareos, falta de aliento y puede producir desmayos. Con tratamiento medicinal se puede recuperar el ritmo normal de los latidos.

Contracción ventricular prematura

Es un tipo de arritmia menos peligrosa que ocurre porque los ventrículos se contraen antes de tiempo y no mantienen la frecuencia cardíaca que les corresponde, lo cual acelera el ritmo cardíaco. Estas arritmias no suelen ser peligrosas, incluso la mayoría de los casos no necesita ningún tipo de tratamiento, no obstante, si la persona que padece este trastorno también presenta taquicardia ventricular o enfermedad cardíaca, este tipo de arritmia puede convertirse en un problema grave. La contracción ventricular prematura puede aparecer repentinamente e incluso puede ser una consecuencia pasajera de la ingesta de cafeína, consumo de chocolate o jarabe para la tos.

Fibrilación ventricular

Este es el ritmo de arritmia más grave, ese que hace que uno responda que las arritmias sí son peligrosas. Se caracteriza por causar latidos irregulares y descontrolados y ocurre porque en el corazón, en lugar de realizarse una sola pulsación a destiempo en los ventrículos, suceden varios impulsos en distintas partes que estimulan al mismo tiempo al corazón a latir. Por lo tanto, podemos decir que son varias partes del músculo diciéndole que lata, lo cual hace que el corazón bombee menos sangre al cerebro y al organismo, provocando un síncope.

La fibrilación ventricular puede llegar a acelerar tanto el trabajo del corazón, que la frecuencia cardíaca puede alcanzar más de 300 latidos por minuto. Si la persona llega a desmayarse en este episodio, es importante acudir inmediatamente a emergencias porque puede ser necesario una reanimación cardiopulmonar y otros cuidados necesarios para mantener la salud del corazón. Anualmente 220 mil personas mueren debido a este trastorno que es más común en personas con enfermedades cardiovasculares.

En este artículo te explicamos las posibles causas de por qué sientes muy fuerte los latidos del corazón.

Estos tipos de arritmia son menos graves que las ventriculares y en muchos casos no llegan a necesitar tratamiento. Estos trastornos son los más comunes y, al igual que la contracción ventricular prematura, también pueden ser desencadenadas por la cafeína, el tabaco, la teína, bebidas alcohólicas y algunos medicamentos como el jarabe para la tos. Enfermedades cardíacas y el hipertiroidismo también pueden ser causa de este tipo de arritmias. Las arritmias supraventriculares son:

Taquicardia supraventricular

Ocurre debido a una frecuencias cardíaca elevada que puede alcanzar entre 150 y 250 latidos por minuto. Este trastorno tiene origen en las aurículas del corazón, las cuales reciben señales eléctricas anormales que hacen que los latidos de las aurículas aumenten la frecuencia cardíaca. Bebés, mujeres, personas ansiosas, fumadoras o muy cansadas tienen mayor riesgo de sufrir taquicardia supraventricular.

Fibrilación auricular

Es la arritmia más común. Ocurre cuando fibras musculares individuales del corazón sufren movimientos convulsivos que causa un ritmo rápido e irregular del corazón. Se cree que más de 2 millones de personas en el mundo sufren de esta afección, la cual es una de las principales causas de infartos, accidentes cerebrovasculares en personas mayores.

La fibrilación auricular puede facilitar que se acumule sangre en las cavidades superiores del corazón, y dicha acumulación puede dar lugar a la formación de un coágulo que puede o no trasladarse hasta el cerebro y obstruir una de las arterias para dar lugar a un ACV. Este tipo de arritmia se controla a través del consumo de medicamentos antiplaquetarios que impiden la formación de coágulos sanguíneos y ayudan a prevenir infartos y accidentes cerebrocasculares.

Síndrome de Wolff-Parkinson-White

Es un conjunto de anomalías debido a vías de conducción adicionales entre los ventrículos y las aurículas, lo cual hace que los ventrículos reciban antes de tiempo señales eléctricas que posteriormente se regresan a las aurículas. Esto es causa de una frecuencia cardíaca muy elevada que puede ir acompañada de mareos.

Aleteo auricular y CAP

Es un trastorno que ocurre cuando las aurículas laten tan rápido que hacen que los ventrículos también lo hagan. Asimismo, cuando las aurículas se contraen antes de tiempo y causan latidos irregulares se habla de contracciones auriculares prematuras (CAP).

Una vez explicados los tipos de arritmias y sus complicaciones, podemos asegurar que la arritmia puede ser más peligrosa si ocurre en los ventrículos, cavidades inferiores del corazón, si no se diagnostica a tiempo y si la frecuencia cardíaca es tan rápida como para superar los 200 latidos por minutos.

Las arritmias que representan menor riesgo para la salud son aquellas que ocurren en las aurículas del corazón, las más comunes también. Por lo general estas arritmias se pueden tratar con la ingesta de medicamentos y no suelen alterar tanto la frecuencia cardíaca como ocurre en la fibrilación ventricular.

Cualquier condición que altere el funcionamiento y ritmo del corazón es una afección que debe ser atendida, vigilada y controlada por un especialista, por lo que el diagnóstico a tiempo y la ingesta de medicamentos son claves para prevenir que cualquier tipo de arritmia derive en una complicación mayor como embolias, infartos y accidentes cerebrovasculares.

Asimismo, existen ciertos factores de riesgo que pueden hacer que una persona con arritmia sea más propensa a tener complicaciones, tales como sufrir de diabetes, insuficiencia cardíaca, arterioesclerosis, hipotiroidismo, obesidad, hipertensión y tabaquismo. Controlar o corregir cualquier factor que pueda empeorar la arritmia es necesario para que estas se mantengan como una condición no tan peligrosa.

El tratamiento de las arritmias dependerá del tipo de arritmia de la persona y de la intensidad con que la misma perciba sus síntomas. Por lo general estas afecciones sugieren la toma diaria de medicamentos como antiplaquetarios o medicinas antirrítmicas que para evitar que la frecuencia cardíaca sea muy lenta o muy rápida o para prevenir episodios seguidos de arritmia.

• La ablación cardíaca se utiliza para destruir partes del corazón que están siendo causantes de ritmos anormales en los latidos.
• El marcapasos ayuda a realizar la tarea del marcapasos natural, el nódulo SA. Este aparato permite identificar cuando el ritmo del corazón es irregular, muy lento o muy rápido, y envía una señal al músculo para que comience a latir con normalidad.

Este artículo es meramente informativo, en ONsalus.com no tenemos facultad para recetar tratamientos médicos ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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